El conjunto dirigido por Brendan Rodgers juega este lunes su primer partido de la temporada como local ante el recién ascendido Bournemouth. Un encuentro que, según el técnico, es "de vital importancia para las aspiraciones del equipo".

"Tener el calor del estadio otra vez, recuperar el nivel de fútbol y, por supuesto, ganar es lo que espero de mi equipo", decía el técnico al ser preguntado por la vuelta del equipo a Anfield, estadio ya en la fase final de su remodelación. "Creo que empezar con confianza tan pronto es vital, y ahí está la clave", subrayaba el entrenador en el primer tramo de la comparecencia.

Preguntado sobre el partido anterior contra el Stoke City y qué conclusiones se podían sacar del juego del equipo, reiteró: "Es la parte impredecible de nuestro juego". Todo y con eso, mientras la temporada va siguiendo su curso y, como es lógico se verán cambios en el aspecto táctico, el manager respondió alegando que "cualquier equipo exitoso tiene la clave en los sprints". Además, el norirlandés tuvo buenas palabras para su compañero de profesión Eddie Howe. Aprovechó para desearles un buen futuro, felicitarles por el ascenso pero eso sí, les advirtió de cara al encuentro que les enfrentará el lunes: "Vienen a un estadio mítico y deberán trabajarselo".

Ya en el final de la rueda de prensa, cuando fue preguntado por las posibles salidas del equipo, tales como Fabio Borini, Mario Balotelli o Lucas Leiva, dijo: "A estas alturas de la temporada son lógicos estos rumores, pero sí se esperan salidas de aquí al cierre del mercado". También hizo referencia a uno de los jugadores más caros en este mercado veraniego en el panorama futbolístico mundial, el brasileño Roberto Firmino: "Se está esforzando mucho para acoplarse a nuestro fútbol y a nuestro idioma. Está muy cerca de estar completamente listo".