El míster italiano compareció ayer en rueda de prensa para analizar a su próximo rival de la Premier League, el Aston Villa entrenado por el francés Rémi Garde. Además también comentó la disponibilidad y el estado físico de alguno de sus jugadores, que después de jugar un duro partido el miércoles frente al Tottenham, han tenido dos días para recuperar fuerzas, entrenar y volver a jugar el sábado a las 18.30 (hora española).
Claudio Ranieri ha sido cuestionado sobre el estado físico del delantero inglés Jamie Vardy, "La condición física de Jamie es buena porque después del partido vi que estaba en plena forma, y poco a poco va a ir entrando en el ritmo normal de entrenamientos, y así recuperar el tono que está demostrando esta temporada. Este sábado si lo veo un poco cansado no disputará el partido completo".
También quiso destacar a sus dos centrales "Morgan y Huth son dos defensas que gozan de una corpulencia fantástica, además de una resistencia que les hace poder disputar muchos partidos sin descanso alguno, por ese motivo son titulares, aunque esta temporada de vez en cuando le doy descanso a Morgan porque estuvo todo el verano disputando torneos internacionales con Jamaica".
Al partido no podrán acudir convocados Matty James ni Jeffrey Schlupp, el primero de ellos con una lesión grave en la rodilla en la que ya está en proceso de recuperación, y el segundo por molestias en el bíceps femoral.
Sobre su rival ha declarado "es cierto que el Aston Villa no se encuentran en una posición muy cómoda en la competición liguera, pero nunca hay que confiarse frente a un rival en horas bajas porque pueden complicarte el partido en alguna jugada aislada y hacerte un gol, además vienen de ganar su partido al Crystal Palace (1-0)".
Este sábado en Villa Park a las 18:30 horas se enfrenta el Leicester City, colíder junto al Arsenal de la Premier League con 43 puntos, y el colista de la competición, el Aston Villa de Rémi Garde. Este encuentro puede dejarnos a los foxes líderes en solitario si pinchan los gunners y por lo tanto más colista a los villanos, o por lo contrario hacer que el Aston Villa se acerque un poco a la salvación.