El entrenador del Crystal Palace, Roy Hodgson, mostró su enfado después de lo que a su juicio fue un triunfo bastante discutido del Brighton, el partido estaba 1-1 y cuando faltaba muy poco para el final llegó el gol de Glenn Murray con el que las Gaviotas sacaron del torneo al Palace.

Tras la derrota, Hodgson admitió que su vocabulario con el árbitro no fue el mejor, pues durante la anotación de Murray pensó que el jugador del Brighton había utilizado la mano para meter el balón.

Sin embargo, después de ver que la acción del jugador del BHA fue totalmente lícita Hodgson señaló que “Tenía muchas dudas sobre el gol que les dio la victoria. Sobre todo por la reacción de mi portero y los jugadores que estaban cerca. Todos parecían estar molestos y yo hice algunos comentarios agresivos contra el árbitro después de finalizar el partido, esa es mi naturaleza pero ahora lamento haberlos hecho”.

El DT aseguró que al principio pensó que el gol había sido con la mano y sintió que debería anularse tras estar muy cerca de los monitores de TV que sirven de apoyo para los árbitros en un partido en el que por primera vez se utilizó el VAR en Inglaterra.

“Vi que charlaban los árbitros tras el gol y tuve la impresión de que Marriner estaba muy atento con Neil Swarbrick mirando el VAR, él lo vio desde un mejor ángulo. Tengo que felicitar al sistema de vídeo y no tengo quejas en absoluto”.

“Todavía tenía la ligera sospecha de que Murray había metido la mano pero después vi que era un gol legítimo”. Por otro lado Roy admitió que también se hubiera sentido molesto si alguno de sus jugadores hubiera hecho un gol con la mano: "estaría muy molesto y no se lo permitiría".