El Bayern dio un paso más hacia el gran objetivo de la temporada y el anhelo del club bávaro esta una instancia más cerca. El 3-1 de visitante ante el Besiktas en el “infierno de Estambul”, que se hizo sentir, culminó una serie deseada que comenzó con el 5-0 en la ida.

El vigente campeón de la Bundesliga, que, dado ciertas circunstancias, este fin de semana se podría coronar con otro título del certamen local, sin embargo, se mostró errático, algo entendible considerando la ventaja obtenida en el partido de ida, el ambiente caliente del Vodafone Park y la valentía desesperada del equipo local.

Primer tiempo deseado

El encuentro, que debido a la diferencia de horario comenzó a las 18 hs CET, arrancó bien para la visita, donde Thiago se desempeñaba de conductor de los ataques, que le equipo desarrollaba principalmente por las bandas.

Apenas comenzó el partido ya encontró la primera oportunidad de gol, un cabezazo de Arturo Vidal, luego de un rasante centro de David Alaba, pasó cerca del palo más lejano del arquero Tolga Zengin. La próxima chance, más clara aún, salió de los pies de Thomas Müller, quién trató de aprovechar un rebote de Zengin luego de un tiro libre de Alaba. El disparo se elevó demasiado por encima del arco rival.

Un minuto después de que Franck Ribery desperdició otra buena oportunidad llegó el primer gol del encuentro. Luego de un centro pateado desde el costado, a unos cinco metros del borde del área, por parte del muy activo Müller, Thiago aprovechó la desatención de la defensa local, tomó la pelota directamente y dejó a Zengin sin chance alguna de reaccionar.

El grito sagrado calmó el clima caliente del Vodafone Park y el Bayern se dedicó a controlar el partido y ahorrar energías. Esa estrategia funcionó hasta el minuto 35, cuando Thiago tuvo que dejar la cancha por una lesión en la planta del pie izquierdo y fue reemplazado por James Rodríguez.

La perdida de Thiago causó una baja de concentración y a poco tiempo fueron amonestados tanto Hummels (min. 37) y Boateng (min. 42). El local sin embargo se acercó solamente dos veces al arco rival, un tiro libre de Ricardo Quaresma pasó por encima del travesaño del arco (min. 37) y un intento de Gönül fue bloqueado hacia un córner que no dio fruto.

extrañado en los últimos 10 min.: Thiago | fuente: @FCBayern
extrañado en los últimos 10 min.: Thiago | fuente: @FCBayern

La mascota del profeta, la gran estrella de la noche

Apenas comenzó el segundo tiempo (Heynckes realizó su segundo cambio en el entretiempo, sacando a Hummels por Süle) la serie se resolvió de manera definitiva, Rafinha subió por la banda derecha y envío un centro venenoso que Gönül (min. 46), luego de un malentendido con su arquero, mandó a guardar en contra.

James celebra con el asistidor Rafinha | fuente: @FCBayern
James celebra con el asistidor Rafinha | fuente: @FCBayern

Unos cinco minutos después del segundo gol se paró el partido debido a la aparición de la gran estrella de la noche, un felino colorado saltó los carteles de publicidad cerca del arco local, corrió hacia el banderín del córner y, luego de ser frenéticamente aplaudido y alentado por el público local, saltó los carteles una vez más para despedirse. Recordemos que Estambul es “la ciudad de los gatos”, la mascota oficial del profeta Mahoma.

La figura de la noche: el gato colorado | fuente: @FCBayern
La figura de la noche: el gato colorado | fuente: @FCBayern

El descuento trae apuros

Unos minutos más tarde llegó el descuento del Besiktas, luego de un error de Alaba, quién, sin apuro, prácticamente le entregó la pelota en bandeja a Gönül. Ese último se la pasó a Vagner Love (min. 59) quién luego de ser bruscamente atendido por Vidal, logró meter la pelota en contra del palo mientras se caía. Boateng no llegó en la línea y repitió su famosa caída ante Messi algunos años atrás.

Combativo: Jerome Boateng
Combativo: Jerome Boateng

El equipo local casi logra empatar el partido dos minutos después, pero Pektemek no logró conectar una pelota en el área chica. El Besiktas se animó, buscó el empate para rectificarse ante su público y presionó a un Bayern en apuros, que sufrió la amonestación de Rafinha (min. 71).

Sin embargo, fue Sandro Wagner, quien había ingresado por Lewandowski, quién calmó las aguas al meter un centro de Alaba con el pecho (min. 84), lo cual significó su primer tanto por Champions League. El encuentro así perdió la tensión anterior y el árbitro Michael Oliver pitó final de manera puntual luego de 90 minutos.

el primero: Sandro Wagner y su inicio goleador en Champions | fuente: @FCBayern
el primero: Sandro Wagner y su inicio goleador en Champions | fuente: @FCBayern

El Bayern ganó un partido importante, condicionado por el resultado obtenido en la ida, ante un público ruidoso en una cancha caliente. Los hinchas turcos terminaron aplaudiendo al equipo alemán cuyos jugadores devolvieron las caricias, emblemático fue el gesto de Sandro Wagner quién se sacó un sombrero imaginario ante la afición local.

La alegría no fue completa debido a la lesión (la sexta desde que llegó al club), aún desconocida, de Thiago, que podría significar otra baja delicada para el mediocampo bávaro luego de la lesión de Corentin Tolisso el pasado sábado. Sin lugar a duda se pudo acercar a su gran objetivo ante un rival complicado, dejando un contundente global de 8-1. Quedará por definirse el próximo rival en la Champions League.