La jornada 15 de la Premier League nos dejó un trepidante encuentro entre dos clásicos del fútbol inglés, como son Aston Villa y Manchester United. El choque se disputó en Villa Park, feudo del conjunto villano.
Un Aston Villa que inició una nueva era en los banquillos, debido al mal arranque que tuvo el conjunto a las órdenes de Steven Gerrard, con la llegada de Unai Emery. El técnico español recoge al equipo en la zona baja de la clasificación.
Por su parte, el Manchester United llegó a este duelo inmerso en una gran dinámica, habiendo conseguido 11 de los últimos 15 puntos posibles. En la anterior fecha vencieron al West Ham gracias a un solitario gol de Rashford y llegaban a esta fecha en el quinto puesto (acceso a UEFA Europa League).
Gran inicio local, aunque recortaron los visitantes
El arranque del encuentro fue frenético, con un conjunto local apretando desde el primer minuto y disfrutando de la posesión del esférico.
Jacob Ramsey, en el minuto 7, recogió el balón al borde del área y dio un pase en profundidad hacia Bailey, el cual sacó un potente latigazo cruzado al que no pudo llegar De Gea y anotó, de esta manera, el primer tanto del partido.
Solamente 4 minutos después del primer gol, Digne ejecutó un libre directo al borde del área que puso en la escuadra derecha de la portería defendida por De Gea, quien no pudo llegar a salvarlo y fue directo al fondo de la red, aumentando así la victoria a favor de los villanos.
A pesar del resultado, que ya era de 2-0 en contra, el United siguió cediendo y a punto estuvo Buendía de poner el tercero, cuando finalizó una jugada colectiva con un disparo lejano que se marchó rozando el travesaño.
Las primeras ocasiones para los Red Devils iban a llegar de manera consecutiva. Rondando la media hora de juego, Garnacho sacó un potente chut que fue interceptado por el Dibu. Un minuto después, un centro de Shaw al área fue rematado por Cristiano Ronaldo, aunque volvió a aparecer el Dibu Martínez para salvar nuevamente a los suyos.
Ya en los minutos finales de la primera mitad, un despeje de la zaga local fue recogido por Shaw en el borde del área, quien finalizó con un disparo lejano que impactó en un jugador local y cambió la trayectoria del balón, introduciéndose de esta manera en la portería defendida por el Dibu y recortando distancias en el electrónico.
Sentencia inicial y reacción nula de los visitantes
El comienzo de la segunda mitad fue similar al del primer tiempo, con un conjunto local muy enérgico sometiendo a un Manchester United que no se mostraba cómodo.
Nada más arrancar, Douglas Luiz asistió con un gran pase a Bailey, que finalizó con un chut raso desde fuera del área y atrapó De Gea con alguna complicación.
Una gran jugada de Watkins por la banda izquierda iba a finalizar con un pase hacia el borde del área al que llegó Ramsey para batir con un potente chut a De Gea y anotar el tercero para los locales.
Posterior al gol, Cristiano probó fortuna con un potente chut lejano, aunque se le marchó alto y desviado.
Elanga, que había entrado desde el banquillo, pudo recortar diferencias gracias a un remate de cabeza, pero el arquero visitante intervino en la acción y despejó el cuero.
En los minutos finales de este segundo acto se adueñó del choque un juego constantemente interrumpido, fruto de la desesperación del Manchester United y del deseo local de finalizar el encuentro para celebrar los 3 puntos en el debut de Unai Emery en Villa Park.