En la fase de grupos partían del bombo 3, en el bombo 1 les tocó el Bayern de Múnich, en el bombo 2 el FC Barcelona y en el bombo 4 el Viktoria Plzen de República Checa. ¿Cómo han llegado hasta aquí?
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Empezando con mal pie
Empezaron jugando en el Giuseppe Meazza ante el Bayern de Múnich que se adelantó en el 25 con un gol de Leroy Sane tras un gran pase en profundidad de Joshua Kimmich, en el 65' una gran pared de Sane y Coman que acabo metiéndose en propia D'Ambrosio. La siguiente fecha visitaron República Checa en un partido muy cómodo que ganaron 0-2 con goles de Edin Džeko y Denzel Dumfries.
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Dos finales ante el Barcelona
Primero tocó jugar en Italia, el Inter de Milán hizo una muy buena primera parte y cerró con broche de oro al borde del descanso con un gran gol del Çalhanoğlu desde fuera del área. En la segunda parte el Barca salió muy enchufado, avisó con un disparo de Ousmane Dembélé que se estrelló en la madera, minutos más tarde le anularon un gol a Pedri por mano previa de Ansu Fati. La gota que colmó el vaso fue un penalti no pitado por mano de Dumfries muy claro.
En la vuelta en el Camp Nou avisaron primero los Nerazzurri con un disparo de Edin Džeko que se estrelló en el larguero, en el minuto 40 un pase atrás de Sergi Roberto que empujo Dembélé y puso por delante al Barca. En la segunda parte Nicoló Barella empató con un gran pase de Bastoni que aprovechó el error de Pique.
En el 81 Lewandowski empató el encuentro con un remate con la pierna izquierda que dio en un defensa. Al borde de que acabara el tiempo reglamentario un gran contraataque de Lautaro que acabó dando un pase a Gosens volvió a poner por delante a los de Simone Inzaghi.
Si el Inter ganaba en casa al Viktoria Plzen estaría en los octavos de final. No falló el Inter, que se impuso 4-0 con goles de Mkhitaryan, doblete de Edin Džeko y Lukaku. En la última jornada sin jugarse nada visitaron el Allianz Arena donde el conjunto bávaro ganó cómodamente 2-0.
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Porto y Benfica, huesos duros de roer
Primero el Porto que en el Giuseppe Meazza se hizo fuerte en defensa y no fue hasta los últimos diez minutos con la expulsión de Otávio que el Inter marcó el único gol de toda la eliminatoria, Lukaku marco con una volea y ganaron 1-0. En el Estadio do Dragão, el Porto trato de empatar la eliminatoria pero Onana se interpuso y consiguió dejar la meta a cero.
Ante el Benfica fue distinto, el club portugués salió a por todas, se adelanto el Inter con un gol de Barella con un remate de cabeza cruzado, en la recta final del partido Lukaku puso el segundo de penalti. En la vuelta el Inter se volvió a adelantar con gol de Barella, al borde del descanso empató Fredrik Aursnes con un gran remate de cabeza. En el 65 se puso por delante de nuevo el Inter con un gran pase de Dimarco para rematar el 3-1 con un golazo de Joaquín Correa. En el 86 con gol de Antonio Silva en una falta lateral marcó el Benfica y Petar Musa empató el partido en el descuento.
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Derbi de Milán en las semifinales
En San Siro, los de Simone Inzaghi empezaron el partido como un tiro, Edin Džeko remató un córner en un forcejeo con Calabria y adelanto al Inter, tres minutos después Henrikh Mkhitaryan puso el 2-0 en el marcador, el Inter pudo sentenciar la eliminatoria pero no lo hizo, el Milán solo tuvo un disparo de Tonali al palo. En la vuelta el Milán lo intento desde el principio por la banda de Leao, pero el Inter sentencio la eliminatoria con un gol de Lautaro Martínez.
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Dimarco, en busca del máximo asistente
Suma cinco asistencias, una en semifinales, dos en cuartos y dos en fase de grupos, el carrilero es un puñal por la banda izquierda y solo está a una asistencia de Kevin De Bruyne para ser el máximo asistente.