Argentina es la nueva campeón del Mundo. Luego de empatar 3-3 ante Francia en los 120 minutos, se impuso 4-2 en los penales para levantar un nuevo trofeo luego de 36 años de espera.
La Albiceleste salió al campo con un 4-4-2. Lionel Scaloni dispuso una única modificación respecto a la goleada frente a Croacia. Ángel Di María ocupó el lugar de Leandro Paredes. Por su parte, Nicolás Tagliafico se mantuvo en el lateral izquierdo, ya que Marcos Acuña no estaba bien físicamente.
Los Galos utilizaron como alineación un 4-3-3. Didier Deschamps contó con el regreso de Upamecano y Rabiot al once titular, luego de recuperarse del "virus del camello" que no les permitió disputar el encuentro de semifinales ante Marruecos.
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Argentina controló a placer durante la primera parte
El nerviosismo se apoderaba de ambas selecciones en el comienzo. Los franceses se mostraban imprecisos con el balón en el mediocampo mientras que los argentinos dominaban la posesión pero no estaban certeros en el último tercio. Alexis Mac Allister tuvo el primer disparo que contuvo Lloris sin dificultades.
Francia intentaba salir jugando desde atrás aunque seguían estando incómodos en el campo. Argentina mantenía la misma sintonía que en el inicio y se encerraba a la espera de contraatacar. Sobre los 17 minutos, De Paul ejecutó un pase filtrado en busca de Messi, en el corazón del área, que dejó pasar para que Di María disparase el esférico por arriba del travesaño.
Unos instantes más tarde, Di María recortó desde la izquierda para irse de su marca, se metió en el área y Dembelé, haciendo la cobertura, tocó el pie del delantero. El árbitro no lo dudó y señaló penal para los sudamericanos. A los 23, Leo Messi se hizo cargo con éxito del penalti y definió con maestría al palo izquierdo del portero francés.
Tras el gol, los franceses despertaron en busca del empate y buscaban dirigir el juego a través de los pies de Griezmann que se metía entre los centrales para ayudar a los mediocampistas. La Albiceleste no pretendía tomar tantos riesgos ni intentaba ser tan vertical en su juego.
El combinado de Scaloni seguía controlando el duelo, achicaba bien los espacios y encerraba a su rival que no lograba salir de su propia área. A los 36 minutos, lograrían ampliar el marcador. Una gran jugada colectiva que inició con un toque de Molina para que después Álvarez abriese para Messi. El capitán controló, alzó la mirada y le puso un pase filtrado a Mac Allister que, posteriormente, le cedió la pelota a Di María para que batiera a Lloris.
Cerca del descanso, ante la falta de respuestas, Deschamps decidió realizar dos modificaciones en ofensiva con la intención de encontrar nuevas respuestas que le permitiesen seguir en partido. El seleccionado sudamericano se veía superior y los once futbolistas colaboraban en la recuperación del balón.
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Una ráfaga goleadora de Mbappé reformuló el complemento
Los europeos mostraban la misma imprecisión en la salida y se veían sofocados ante la constante presión contraria. Una interesante jugada colectiva de los argentinos culminó con un remate ejecutado por De Paul que controló Lloris con facilidad.
Francia llegaba únicamente con balones detenidos que eran controlados por Dibu Martínez con facilidad e intentaba sorprender por las bandas. De todas formas, Argentina arribó al área con claridad y Julián Álvarez probó suerte con un disparo raso que contuvo el portero francés en dos tiempos.
Los sudamericanos apostaban a lastimar mediante un contragolpe y continuaban defendiendo sin recibir casi peligro. Sobre los 59 minutos, una interesante jugada con pases precisos y verticales logró que Álvarez filtrase el esférico para un Mac Allister que perdió la carrera con Upamecano, permitiendo que Lloris despejase el peligro con sus pies.
A los 70 minutos, los galos llegarían con intención de dañar por primera vez en el encuentro. Primero, Kolo Muani ganó de arriba en un córner pero su cabezazo se marchó desviado y luego Mbappé desequilibró por la izquierda y lanzó un remate que se fue directamente a la tribuna.
Sobre los 80 minutos, Otamendi perdió la carrera con Kolo Muani, al que fue agarrando y metiendo el cuerpo antes de ser derribado dentro del área. El árbitro no lo dudó y señaló penal. Mbappé convirtió y descontaba las acciones para su selección. Instantes después, los franceses alcanzarían la igualdad. Kylian Mbappé logró conectar una pared con Kolo Thuram para quedarse solo ante el 'Dibu' Martínez y batir su portería.
La Albiceleste no bajó los brazos y fue con todo en busca del tercer gol. Su rival intentaba apagar la intensidad haciendo gala de su portento físico. En el tiempo añadido, Camavinga ingresó al área y tuvo el gol de la victoria aunque el Dibu Martínez contuvo el balón en dos tiempos. La última ocasión, previa a la prórroga, la tuvo Messi con un remate que despejó Lloris al córner.
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Partido de infarto en la prórroga
Los europeos se hacían del dominio de la posesión y jugaban con el desgaste rival que apenas podía controlar el balón para generar peligro. Camavinga hacía un buen trabajo e impedía que Messi participara en el armado del juego argentino.
Argentina sufría mucho por la banda derecha. De Paul parecía quedarse sin energía para darle la cobertura a Montiel. Mbappé y Kolo Muani olían sangre y pretendían desequilibrar esa zona. Scaloni realizaba variantes con la intención de darle mayor frescura a su equipo. Upamecano se convertía en héroe tras tapar dos disparos de Lautaro Martínez que tenían destin de gol.
Sobre los 109 minutos, los sudamericanos volverían a ponerse en ventaja. Lautaro Martínez ganó en el último tercio y disparó a puerta. Lloris dio un rebote que fue capturado por Messi que solamente tuvo que empujar el balón para anotar su doblete. El VAR debió chequear la posición del futbolista del Inter en el inicio de la jugada pero estaba totalmente habilitado.
Los galos fueron a buscar el empate y lo terminarían consiguiendo. A los 116, un disparo de Mbappé se estrelló contra el brazo extendido de Gonzalo Montiel por lo que el árbitro señaló penal para Francia. El extremo se haría cargo y anotaría su hat-trick tras batir al Dibu Martínez que se tiró al poste contrario y mandaría el encuentro a la tanda de penaltis. El portero argentino taparía más tarde un mano a mano a Kolo Muani que entraba en soledad luego de una falla defensiva.
En los penales, el portero argentino contendría el disparo de Coman mientras que el remate de Tchouaméni se iría afuera. Argentina convertiría sus cuatro penales y lograría levantar su tercera trofeo del Mundo.