El Manchester City sentencia el duelo a la contra

El Manchester City se ha impuesto por 1-3 al Swansea City, en el Britannia Stadium gracias a dos goles de Agüero, y a uno de Sterling, en un encuentro en el que el equipo de Guardiola dominó la pelota.

El Manchester City sentencia el duelo a la contra
Fotografía: Man.City
tarekfutbol
Por Tarek Guerrero

El encuentro comenzó con un gran dominio del Manchester City, que empezó teniendo el esférico desde el primer minuto y lo utilizó para llegar al arco contrario con mucho peligro, intentando crear desequilibrio circulando el esférico e intentando profundizar por ambas bandas sin ningún éxito, pues el cuadro local estaba planteando una gran batalla en el primer cuarto del campo por cada esférico y aprovechaba cada recuperación en terreno de juego propio para salir en velocidad por los dos costados. El 0-1 llegó por medio del Kun Agüero, y este gol relajó en exceso al conjunto dirigido por Pep Guardiola, que encajó al poco tiempo después, encajó el gol del empate a manos de Fernando Llorente. 

Dominio inicial del conjunto visitante

Aunque en muchas ocasiones esos intentos cayeron en saco roto ante la presión alta que estaba ejerciendo el conjunto citizen sobre la salida de balón del contrincante, donde estaba recuperando y circulando la redonda a una gran velocidad. Después del primer tramo de juego, el conjunto skyblue perdió el control de la situación y la posesión del balón, ante un cuadro local que estaba presionando más arriba, y que estaba tratando de llegar con peligro por ambos costados para centrar balones al área y buscar el remate de hombres como Fernando Llorente, que eran un auténtico peligro aéreo. Fruto de esa circunstancia, el conjunto dirigido por Pep Guardiola optó por replegarse en campo propio y aprovechar las recuperaciones de balón para salir en velocidad con hombres como Kevin De Bruyne y David Silva.

Control citizen, con el balón y jugando al contraataque

El segundo tiempo comenzó con dominio del conjunto de Manchester, que tuvo el esférico desde el primer instante, y que trató de consolidar su dominio en terreno de juego rival, intentando domar a su rival tocando, aunque la tarea estaba siendo más ardua de lo esperado, pues sus fases de ataque posicional estaban siendo más espesas de lo que cabría esperar a causa del buen repliegue que estaba realizando el conjunto rival, que estaba juntando las líneas de presión de gran manera, en campo propio, impidiendo además, que el equipo dirigido por Pep Guardiola fuera capaz de profundizar por los costados por donde Sagna y Clichy estaban intentando acercarse al área contraria con un cierto peligro. El líder de la liga, consiguió adelantarse de nuevo en el marcador, por medio del Kun Agüero, que volvió a batir a Lukasz Fabianski, aunque en esta ocasión, marcó desde los once metros, tras un remate a lo “panenka”.

Tras este gol, el City siguió dominando el encuentro, aunque consiguió rebajar unos grados el ritmo de intensidad, tanto en la circulación del balón, como en el ritmo de intensidad al que atacaban y defendían ambos equipos. Pese a ese descenso en la intensidad, el equipo siguió llegando con peligro a la portería rival, gracias a la aparición de hombres como David Silva y Raheem Sterling, en un conjunto muy dividido tras la entrada de Fernando en el campo, pues carecía de más jugadores creativos, con mayor capacidad para dar el último pase. Pasaron los minutos, y el cuadro citizen siguió siendo dueño del encuentro, tocando, y gustándose en terreno de juego contrario terminando las jugadas con mucha calidad, a pesar de que estaba fallando en la definición.

El 1-3 para los visitantes, llegó por medio de Raheem Sterling que remató una salida al contraataque iniciada por Kevin de Bruyne en campo propio. En los últimos instantes del enfrentamiento, el Swansea se siguió manteniendo replegado en su campo, y siguió optando por salir en velocidad al contraataque por el costado diestro, por el que estaba encontrando espacios, ante la lentitud de Jesús Navas y Clichy para bajar a defender, aunque pese a ello, estaba teniendo dificultades para superar las líneas de presión de un Manchester City que seguía mostrando un gran equilibrio en todas las facetas del juego. Finalmente, el partido concluyó con una fase de posesión larga por parte del equipo visitante que estaba agotando los minutos de la basura, al mismo tiempo que saboreaba, la que era su 10ª victoria consecutiva.