El Manchester City volvió a dejarse dos puntos en casa, esta vez ante el Tottenham, alejándose cada vez más del líder, el Chelsea. El conjunto local dominó el partido, pero una vez más, encajó los goles en las únicas llegadas con peligro del rival. Gabriel Jesús anotó en su debut, pero fue anulado por fuera de juego. Pep Guardiola estaba contento con la actuación de sus jugadores.

Se repite la historia

El conjunto Citizen volvió a dominar, pero su falta de acierto de cara a portería y la facilidad con la que encaja goles le condenó una vez más. Pep Guardiola dejó clara la razón de la no victoria, la falta de gol: "Una vez más, hemos perdido por fallar demasiadas ocasiones de gol" decía. El técnico alabó el juego del equipo calificándolo como "uno de los mejores partidos de la temporada".

A pesar del buen juego del equipo, se veía un Guardiola frustrado. La inoperancia del equipo en ambas áreas permitió al Tottenham de Pochettino sacar un punto del Etihad que les tiene que saber a gloria pese a no serles de gran utilidad en cuanto a la clasificación. El técnico catalán consideró el partido como una mala rutina: "El equipo ha estado espectacular, pero ha sido como un deja vu. Lleva siendo así toda la temporada" explicaba.

El mister español aclaraba que volvió a suceder lo mismo que en Liverpool ante el Everton: "Nos pasó ante el Everton, creamos muchísimas ocasiones, ellos crearon cuatro y marcaron las cuatro. También nos ocurrió contra el Chelsea. Hoy crean dos y marcan las dos, tenemos problemas para marcar" afirmaba. Finalizaba el análisis diciendo que el equipo jugó con corazón y de la manera correcta, pero que no fue suficiente para ganar.

"Algún día puede que Mike Riley me explique cuándo es empujón y cuándo no"

El técnico se mostró muy enfadado por la pena máxima no señalada sobre Sterling que acabó con la contra del Tottenham que empató el encuentro. Más aún después de que el mismo Walker reconociera su culpa: "¿Qué ha dicho Walker? Ah vale" preguntaba a los medios. Continuaba el técnico explicando su postura: "Algún día puede que Mike Riley me explique cuándo es empujón y cuándo no, no entiendo, las reglas son las reglas aquí" se preguntaba. Pese a ello, el entrenador dejó claro que si no se desaprovechan las ocasiones el árbitro no es determinante.