En el marco de la quinta ronda de la FA Cup, el Burnley y el Lincoln City se enfrentaron en el estadio Turf Moor para definir al primer equipo clasificado a los cuartos de final del torneo, y, contra todo pronóstico, el club de la ciudad de Lincoln logró sacar la victoria sobre el final para sentar un precedente con respecto a equipos no profesionales y cuestionar el nivel del Burnley en la Premier League.
Los locales llegaban al encuentro tras empatar con el Chelsea en la última jornada de la Premier, cosa que le significaba un buen augurio para el partido, mientras que los visitantes arribaban con optimismo luego de ganarle al Woking FC por la Conference Premier el pasado fin de semana.
El partido inició de forma tranquila y al minuto cinco llegó la primera ocasión para el Lincoln, a través de un remate por parte de Jack Muldoon que se fue por encima del travesaño. Sería hasta el minuto 20 cuando los anfitriones lograran inquietar el arco visitante por primera vez, y fue por medio de un disparo de Andre Gray que bloqueó bien el portero.
Sobre el final del primer tiempo, los locales propusieron ligeramente más, teniendo una importante ocasión en los pies de Joey Barton, y mantuvieron ese ritmo los minutos restantes, pero la defensa del Lincoln se mantuvo bastante firme.
El segundo tiempo inició como arrancó el partido, con la misma pasividad por parte de ambos equipos, aunque comenzaron a predominar un tanto más las faltas y el juego brusco, y esto dio pie a el constante corte del juego en ambas partes.
La intensidad sufrió un bache en gran parte de la segunda mitad, y cuando más se acercaba el final empezaron a soltarse las escuadras. Un par de llegadas sin tanto peligro crearon cierta preocupación en la zaga del equipo visitante, pero no se llegó a inquietar seriamente en ninguna de ellas.
Al minuto 83, el Lincoln estuvo cerca de echar por la borda el trabajo realizado cuando James Tarkowski cabeceó un tiro de esquina que estuvo cerca de acabar en gol.
A pocos minutos para el término del tiempo reglamentario, los visitantes blindaron la defensa y lograron sacar un par de tiros de esquina, uno de los cuales fue ejecutado a un minuto para el final (89') y tuvo como protagonista a Sean Raggett, quien golpeó el balón sobre el segundo palo para batir al portero Adam Marriott y mandar el esférico al fondo de las redes, haciendo que estallaran en ebullición los aficionados visitantes.
La embestida de los anfitriones en los cinco minutos añadidos fue contenida por el trabajo de Farman en la portería, quien sacó una pelota de gol sobre el final para la efervescencia de sus compañeros. El partido fue finalizado por el árbitro y de esta manera la Conference Premier metía un representante en los cuartos de final de la FA Cup sin que nadie se atreviera a predecirlo.
Resultado histórico
Con este marcador el Lincoln City se convierte en el primer club no profesional en más de un siglo que logra avanzar a la sexta ronda de la FA Cup, cosa que no sucedía desde que estalló la Primera Guerra Mundial.
Además, se comienza a fijar un precedente con respecto a los equipos de Premier que sucumben ante los clubes de categorías menores en el sistema de ligas del fútbol inglés, hecho que ha ocurrido en los últimos años -a pesar de que eventualmente no ganen el torneo-, y que, por ejemplo, también le ocurrió al Liverpool en esta misma copa.
Con partidos como este la FA Cup parece dejar en evidencia que año tras año se transforma más en el lugar común en que coinciden los más grandes contra los más humildes -y no profesionales-, y cualquiera puede ganar, sin importar la historia, el presente o el presupuesto.