La lesión de Zlatan Ibrahimovic arrojó grandes interrogantes a la mesa de trabajo de José Mourinho. El primero era cómo suplir a un jugador de la talla del sueco, goleador en su primera temporada en Inglaterra, y quién podría estar a la altura de tal tarea. Como primer apuntado apareció Álvaro Morata, el delantero español relegado al banco de suplentes en el Real Madrid, por el cual ya había un acuerdo y solo restaba la firma.
Pero apareció Romelu Lukaku. El futbolista siempre fue del agrado de José Mourinho, y en medio de las negociaciones entre el Manchester United y Real Madrid por Morata, el belga pidió ser transferido. Inmediatamente se congeló el fichaje del español, y desde Old Trafford apuntaron toda su artillería hacia el Everton, donde quiso meterse también el Chelsea, buscando un reemplazo para Diego Costa.
Finalmente, Lukaku se decidió por los ‘Red Devils’, y tuvo su debut el pasado amistoso ante LA Galaxy, donde jugó el segundo tiempo y tuvo una clara oportunidad de gol. Esta vez, frente al Real Salt Lake, comenzó como titular, y anotó el segundo gol de su equipo a los 38’ de la primera mitad, luego de que Henrikh Mkhitarian igualara la apertura del marcador por parte de Luis Silva. El ex Everton recibió un pase ingresando al área, gambeteó al arquero y a un defensor, y definió cruzado ante otro rival que intentó bloquearle el remate.
El Manchester United saltó al campo de juego con Pereira en el arco; Jones, Lindelöf, Blind y Fosu-Mensah; McTominay, Carrick, Pogba, Lingard, Mkhitaryan y Lukaku. Jesse Lingard fue quien mejor aprovechó su oportunidad, interviniendo en las jugadas ofensivas y dando una mano en ambos goles. Incluso evitó una chance de gol rival con una entrada a ras del suelo contra Plata. En el segundo tiempo fue expulsado Antonio Valencia, mientras que Juan Mata sufrió una lesión.
Lo siguiente para el equipo de Mourinho será el derby de Manchester en Houston, el próximo 20 de julio en el NRG Stadium por la ICC Champions Cup.