El Boxing Day ha llegado a Inglaterra. Hoy era el día en el que la fecha 20 se ponía en marcha con el objetivo de tener varios partidos atractivos luego de un gran día festivo como es Navidad.
El partido tenía mucho significado en la previa. Watford necesitado por cambiar la mala racha que estaba teniendo y reencontrarse con el triunfo. Mientras que, por el lado de los de Claude Puel, necesitaba ganar si quería seguir en el camino de competiciones europeas.
Un Watford venía de perder cuatro partidos de forma consecutiva y no ganaba desde hacía seis fechas, cuando en esa oportunidad derrotó al Newcastle a domicilio por 3-0. Por ello, los dirigidos por Marco Silva estaban necesitados de un triunfo, quería reencontrarse con el triunfo para escalar en la tabla de posiciones, luego de haber recaído tras una gran comienzo de temporada.
Por el otro lado, Leicester llegaba luego de lograr empatar un gran partido sobre la hora y con un hombre de menos ante el poderoso Manchester United. Los Foxes necesitaba los tres puntos para acercarse a los equipos que están luchando por ingresar a copas europeas como Burnley, Arsenal, Tottenham y Liverpool.
Leicester no pudo aguantar la ventaja
El Boxing Day estaba en marcha. Watford y Leicester se encargaban de abrir la jornada de las 15 horas en Inglaterra, bajo las ordenes del aárbitro Chris Kavanagh. Desde el comienzo se notó que el encuentro sería parejo, más trabado que jugado, y en donde las faltas eran las que se adueñarían del partido.
Cuando Watford se lograba acomodar, se mostraba un equipo que quería conducir la pelota por el piso, pero sin imponerse en el juego. Al igual que el Leicester, que tampoco podía hacerse dueño, pero se encargaba más de presionar ante la salida limpia de los Hornets. Sin embargo, los Foxes lograban ser mucho más peligroso que el equipo local, a pesar de que no era el dominador.
Para encontrar la primer chance clara hubo que esperar hasta el primer cuarto de hora del partido. El encargado fue el equipo visitante, con una buena recuperación de Ben Chilwell que logró llegar hasta el fondo, desde el sector izquierdo y lanzó el centro para Okazaki, quien cabeceó de forma perfecta, pero el portero Gomes le negó el primer gol del encuentro. Luego, el que no podría anotar sería Jamie Vardy, quien tras quedar mano a mano con guardametas definió de mala forma.
Minutos más tarde, respondió el Watford a través de Molla Wagué que ejecutó en soledad, pero los jugadores de Leicester lograron bloquear un remate que tenía destino de arco. A pesar de aquella chance, el visitante era el dueño de las jugadas más peligrosas. Mahrez avisó por primera vez, pero su remate terminó en las manos de Gomes. Minutos más tarde el jugador argelino tuvo su revancha. Albrighton sacó un gran centro a la cabeza de Mahrez, quien con un un movimiento de manual anotó el 1-0 para los Foxes.
Los de Claude Puel ganaban por ser superiores al local en situaciones de gol y en la eficacia, porque Watford intentaba ser el dueño del partido pero no podía demostrar sus intentos en el área visitante. Una de la más claras para los Hornets llegó en los pies de Richarlison, pero el brasileño desperdició un mano a mano increíble ante la salida de Kasper Schmeichel. Aquella oprotunidad sería el aviso del conjunto local, ya que a un minuto del final el arquero de Leicester no pudo rechazar un tiro de Molla Wagué y de esa manera llegaba la merecida igualdad para los de Marco Silva.
Schmeichel y una mano para el Watford
Desde que el Leicester marcó el primer gol, los locales se hicieron el dueños del partido. Doucouré fue el primero que tuvo la oportunidad para anotar la ventaja en la segunda parte, pero su tiro se fue demasiado lejos de la portería. Después llegaría el turno de Okaka que, con una pirueta en el área rival, sacó un remate que pasó cerca del poste.
Tras aquellas dos chances, llegó el momento en que Watford logró imponerse y sacar la diferencia en el marcador, y fue de la forma que más lastimo a Leicester en el encuentro: con la pelota parada. Una buena jugada preparada le dio la oportunidad, nuevamente, a Doucouré para poner arriba a los Hornets. El francés se encontró con la chance de desviar una pelota que parecía que terminaría fuera, pero luego Schmeichel manoteó en busca de detenerla y terminó dentro del arco. Watford encontraba el gol que tanto había buscado.
Ya con la ventaja a favor de Watford, que había ido buscar muy decidido en los primeros minutos, el que estaba obligado a salir era el Leicester, a pesar de no encontrarse de la mejor la manera. Eso, favoreció al local, ya que a pesar de no llegar al arco, el visitante mostraba que tampoco sabía cómo. En aquel entorno, los Hornets pudieron aumentar la ventaja que les daría tranquilidad, pero Tom Cleverley remató cruzado y el balón se perdió por el fondo del campo.
Los de Marco Silva se retrasaron cada vez más, mientras que por el lado de la visita, se buscó de todas formas llegar a la igualdad. Wes Morgan tuvo una chance clara, pero Gomes respondió de forma espectacular desviando al córner y luego respondería de la misma forma al rechazar un buen cabezazo del argentino Ulloa. La última fue para el argelino Slimani, pero su remate terminó fuera.
Con este resultado, Leicester no pudo acercarse a puestos de Europa League, y en la próxima jornada deberá visitar al Liverpool. Mientras que Watford logró acercarse a su rival de turno y el sábado le tocará recibir al colista Swansea con el objetivo de seguir sumando unidades y confianza, algo que había perdido en las ultimas fechas de Premier.