El Manchester City venció y se clasificó para la final de la Carabao Cup aunque aún debe esperar su rival, que se definirá mañana por la noche. Los de Guardiola hicieron valer su victoria en la ida y solventaron un partido cómodo en el que el Bristol apenas puso algún apuro pese al resultado.
Ashton Gate se vistió de gala, cada aficionado local portaba un banderín rojo o plateado, lo que ofreció una magnífica escena a la salida de los jugadores. Al grito de ‘Ole, ole, ole, ole, Bristol, City…' ambos conjuntos saltaron al césped. Un ambiente mágico que daba buena cuenta de la importancia que suponía este partido para los locales. Guardiola no pretendió pasar ningún tipo de sustos y alineó a sus once futbolistas de gala. Así lo hizo también el técnico local.
Dominio absoluto
Como era previsible, los visitantes saltaron al terreno de juego con la firme idea de dominar la posesión y jugar con la paciencia y tranquilidad del resultado de la ida. El Bristol, replegado, mantuvo sus líneas muy retrasadas, exactamente igual que en el Etihad Stadium. Se impuso la intención de Guardiola. Leroy Sané fue el jugador más peligroso en el arranque, buscó y creó espacios y, además, fue el primero en disparar a puerta. Los Robins eran incapaces de cruzar el mediocampo con la pelota en su poder, lo que facilitó mucho más el trabajo de los Citizens.
La primera ocasión clara llegó en el minuto 12. Agüero envió un centro bombeado desde el pico izquierdo del área que terminó rebotando en el larguero para susto de los hinchas locales. Continuó el rodillo del City, que provocó que todo el partido se disputara en la mitad del campo del Bristol City. En el ecuador del primer tiempo, Zinchenko tuvo una gran oportunidad para abrir el marcador pero su remate se marchó desviado cerca del poste izquierdo.
El City no paró de mover el árbol en ningún momento y la fruta acabó cayendo. Primero, Bernardo Silva fue quien pudo estrenar a su equipo en el marcador, pero Luke Steele realizó una intervención de mucho mérito para evitarlo. Un minuto más tarde, el propio jugador portugués luchó y ganó un gran balón en la línea de fondo para terminar sirviéndosela a Leroy Sané, quien disparó y terminó anotando gracias al desvío de Flint en su intento de despeje. No estuvo exenta de polémica su celebración al mandar callar a la grada situada detrás de la portería de Steele.
Sorpresa en el final
Lee Johnson trató de dar un revulsivo a su equipo y realizó un doble cambio tras el descanso, un defensa y un centrocampista. De poco sirvió. Apenas transcurridos cuatro minutos, el City armó una gran contra, De Bruyne avanzó con el balón, superó el medio del campo y filtró un gran pase para el ‘Kun’ Agüero, quien anotó con un brillante disparo cruzado.
La zaga del Bristol, más dispersa que en la ida, no pudo contener la furia ofensiva del City, que llegaba ciertamente frustrado tras el primer partido, cuando los Robins estuvieron casi todo el partido defendiendo con sus once futbolistas dentro del área. Los de Guardiola, cerca de relajarse, siguieron su esquema de juego manteniendo la posesión y el dominio del encuentro. Bajó la intensidad del juego por parte de ambos, que vieron como nada importante iba a cambiar en lo que restaba de noche.
Mediado el segundo tiempo, Marlon Pack consiguió descontar y esperanzar a su afición, al menos, de evitar la victoria visitante. El mediocampista del Bristol remató de de forma maravillosa un centro de Jamier Peterson desde la izquierda. El gol no cambió el transcurso del partido, que continuó siendo un monólogo del City con apariciones muy intermitentes del Bristol.
Fruto de la relajación, en el minuto 95 Aden Flint volvió a marcar, esta vez en la portería acertada, para poner el empate a dos en el electrónico, lo que acercaba al Bristol a un gol de la prórroga. Con el tiempo cumplido, De Bruyne selló el partido con un tanto en el minuto 97 que otorgaba la victoria a los Citizens. Difícil de creer el excitante final de partido.
Ahora, el Manchester City aguarda a lo que pase mañana entre Arsenal y Chelsea en el Emirates Stadium para conocer al rival que se enfrentará en la final. Antes de volver a la Premier League, los Sky Blues disputarán los dieciseisavos de final de la FA Cup en Gales ante el Cardiff.
Por su parte, el Bristol City se centrará a partir de ahora en su objetivo de ascender a la Premier League. Quintos en el Championship, recibirán este sábado al Queen’s Park Rangers en su feudo.