Temporada nueva, vida nueva. Así lo ve Rubén Blanco, que afronta su segunda temporada como futbolista de pleno derecho de la primera plantilla del Celta motivado por la posibilidad de poder hacerse con un puesto en el once titular de Eduardo Berizzo, en el que estará sí o sí en la primera jornada en el Ciutat de Valencia ante el Levante por la sanción de Sergio Álvarez, que vio tarjeta roja en el último partido de la anterior campaña ante el Espanyol. Para el de Mos, jugar el primer partido no da ventaja de cara al resto de competición, pero sí supone una posibilidad que quiere aprovechar: “No creo que tenga ventaja. Tanto Sergio como yo partimos en las mismas condiciones, aunque es cierto que el domingo tengo la oportunidad de jugar y tengo que aprovecharla”.
“Al final en el puesto de portero solo puede jugar uno y le tocó a Sergio toda la temporada. Este año partimos de cero los dos y estoy trabajando para intentar ganarme el puesto”, comentó Rubén que comentó que todo el equipo está “con muchas ganas de empezar” y que lograr una victoria fuera de casa en el primer partido sería "muy importante" para “coger confianza”.
Para el mosense, la fiabilidad defensiva que está mostrando el Celta —ha encajado cinco goles en ocho partidos con portería cero en los últimos cuatro— es fundamental para ser “un equipo competitivo”. “Si no encajas goles vas a sumar por lo menos un punto”, matizó el canterano, que se mostró satisfecho por la continuidad del bloque así como por las prestaciones de los nuevos fichajes: “Las incorporaciones que han llegado nos han dado un plus pero la base es la del año pasado y eso es bueno porque nos da una idea y un estilo de juego marcado”.
Para acabar, Rubén consideró que el Levante va a ser un rival complicado para el estreno: “El Levante es un equipo que lleva varias temporadas seguidas en Primera, que defiende bien y que es fuerte en su casa”, concluyó.