El perfil del Athletic de Bilbao

El Valencia CF visita el Nuevo San Mamés en un duelo de necesidades entre el conjunto che y el equipo anfitrión. Los de Ayestarán, colistas en la tabla, se enfrentan a un Athletic que viene de perder estrepitosamente frente al Sassuolo en Europa League.

El perfil del Athletic de Bilbao
Aduriz en un partido con el Athletic de Bilbao | Fuente: Ricardo Larreina - VAVEL.com
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Por Adrian Gisbert

El Athletic de Bilbao no pasa por su mejor momento. A pesar de su victoria el pasado fin de semana frente al Deportivo de la Coruña -al que venció en Riazor gracias al golazo de Raúl García-, la derrota del jueves frente al Sassuolo italiano en Europa League volvió a demostrar que las virtudes de las que presumía el equipo de Valverde se han convertido en sus mayores carencias en este inicio de temporada. 

La garra del león

El conjunto bilbaíno afronta sus partidos con la intensidad por bandera. Jugadores como Raúl García, De Marcos, Mikel San José o Aritz Aduriz le dan al equipo ese plus de garra que tanto les caracteriza en ataque. Al calor de la Catedral el elevado ritmo de juego que el 'txingurri' Valverde imprime a sus equipos aumenta varios puntos, y su presión ordenada hace que el conjunto rojiblanco saque petróleo de cada balón robado en el centro del campo. Los leones alardean asimismo de una gran inteligencia en su juego defensivo, administran bien los tiempos y aguardan con paciencia su oportunidad. 

A la hora de asediar la portería rival, el juego aéreo -ya sea a balón parado o a pelota corrida- es uno de sus puntos fuertes. Raúl García y, sobre todo, Aduriz son las dos grandes amenazas bilbaínas en el área rival. Ambas torres se complementan a la perfección con Beñat, de corte más técnico, y la velocidad de Muniaín e Iñaki Williams en las bandas. Gran parte de las opciones valencianistas pasan por que la pareja de centrales que presentará Ayestarán, Mangala y Aderllan Santos, impongan su poderío por arriba. Si se impone en la batalla aérea, el Valencia tendrá tendra mucho ganado. 

El conjunto valencianista ya comprobó en la pasada Liga la pesadilla en que se puede convertir un encuentro contra los leones. Ambos duelos se saldaron con cómodas victorias para el Athletic -3 a 1 en el Nuevo San Mamés y 0 a 3 en Mestalla- en dos partidos en los que el conjunto rojiblanco demostró una superioridad táctica pasmosa sobre el equipo che. En la ida, el Valencia se ahogó en la Catedral y vio cómo los leones se lo comían vivo al remontar el tanto inicial de Parejo en dos arreones. Durante el partido en Mestalla, el conjunto rojiblanco supo aguantar las acometidas valencianistas y aguardó pacientemente a que alguna brecha apareciese en la defensa che. El resultado, tres goles en siete minutos que silenciaron Mestalla y pararon en seco la racha de victorias que los de Neville habían firmado hasta el momento. 

Idiosincrasia única

La implantación de la Ley Bosman a mediados de los noventa reinventó por completo el mercado, creó un paradigma y despejó el camino para el crecimiento de los transatlánticos futbolísticos. Contra este paradigma cada vez surgen más detractores, organizados en torno a esa famosa muletilla, odio eterno al fútbol moderno. Para el equipo bilbaíno, sin embargo, nada cambió durante aquella revolución, ya que su mercado de jugadores es aún más reducido que aquel del que los clubes disponían antes de la mencionada ley, de solo tres jugadores extranjeros por plantilla. Así lo describe el propio Athletic en su página web

"Nuestra filosofía deportiva se rige por el principio que determina que pueden jugar en sus filas los jugadores que se han hecho en la propia cantera y los formados en clubes de Euskal Herria, que engloba a las siguientes demarcaciones territoriales: Bizkaia, Gipuzkoa, Araba, Nafarroa, Lapurdi, Zuberoa y Nafarroa Behera, así como, por supuesto, los jugadores y jugadoras que hayan nacido en alguna de ellas."

Esta filosofía, única en el deporte rey al máximo nivel, hace que en Bilbao gozen de la simpatía y admiración de todo el planeta fútbol. A pesar de la evidente desventaja que supone en la Liga disponer de un mercado de futbolistas tan reducido, el Athletic es, junto a Real Madrid y FC Barcelona, uno de los equipos que nunca ha bajado de Primera División. En los últimos años, además, está siendo un fijo en los puestos de arriba de la clasificación, y ya encadena varias temporadas seguidas con presencia en competiciones europeas.

No obstante, el hándicap a veces sí corta las alas de la dirección deportiva bilbaína, y este verano, sin ir más lejos, no se han acometido fichajes en la entidad. Quizá la edad de algunas piernas ya empieza a ser un lastre demasiado grande. Los de Valverde no han encontrado, de momento, un adecuado tono físico, uno de sus puntos fuertes, y todo el juego rojiblanco se ve afectado por ello. Sin embargo, en la Catedral pueden estar seguros de que, a la hora de la verdad, los suyos estarán ahí.