Desde que recibió el brazalete de capitán tras la salida de Augusto Fernández en diciembre de 2015, Hugo Mallo ha experimentado un crecimiento asombroso a nivel futbolístico. Como capitán, ha demostrado ser un líder dentro del vestuario respetado por todos. Y dentro del campo sobre todo esta temporada, ha dado un salto de calidad muy importante. Sus subidas por banda derecha se han incrementado y se han hecho más eficaces, siendo esta una forma de abrir el juego y el Celta ha encontrado en Hugo una vía de escape cuando hay un atasco por el centro. Además ha explotado su faceta goleadora marcando varios goles, uno de ellos al eterno rival, al Deportivo en el derbi; y todo ello sin olvidar sus ayudas en defensa que siguen siendo vitales.
Además Hugo como gallego y canterano desde la cuna, prácticamente es uno de los jugadores más queridos por la afición. Ha vivido con el Celta los peores momentos, con el equipo al borde de la desaparición luchando por no descender a Segunda "B", y ahora está viviendo uno de los más bonitos, con el equipo de nuevo en Europa y logrando cosas importantes.
A nivel de partidos jugados con la celeste, el de Marín va escalando poco a poco puestos en la clasificación histórica del club y todo apunta a que lo seguirá haciendo hasta convertirse en uno de los más importantes de siempre.
A día de hoy Mallo ocupa el puesto 17 dentro de la clasificación de futbolistas que más veces vistieron la camiseta celeste, pero antes de que concluya la temporada puede llegar hasta la decimosegunda posición. Al Celta le restan 11 partidos de Liga más la eliminatoria de cuartos de la Europa League contra el Genk. Si superaran a los belgas, la cifra de encuentros serían de 15 ó 16 de jugar la final de Solna.
Otro mito del celtismo como es Vlado Gudelj está a punto de ser igualado por Hugo Mallo. El delegado actual contabiliza 258 partidos, uno más que el marinense, mientras que por delante están Cáceres (264), Herminio (266), Mori y Pepe Villar (269), que también podrían ser rebasados entre abril y mayo. Por ahora los 533 encuentros de Manolo o los 391 de Atilano están fuera del alcance de Mallo, que a su favor cuenta con sus 25 años que dentro de un año pueden permitirle alcanzar los 300 partidos que además de los dos citados, únicamente lograron Maté (331), Juan (325), Vicente (319) y Santiago Castro (303).
Por ahora Mallo está centrado en su club, con el que está realizando una fenomenal temporada que le llevó a albergar esperanzas de ir a la selección. Lopetegui conoce al céltico desde su etapa en las categorías inferiores, a las que Mallo acudió asiduamente siendo sub 19 y sub 20.