El rival más duro para los realistas serán los rusos comandados por Mancini en el banquillo, y el ruso Kokorin en el campo, esta será su mayor amenaza. El delantero de 26 años nacido en Valuyki se ha convertido en pieza clave del equipo tras las ventas de algunos cracks. Desde su llegada del Dinamo Moscu en verano de 2015, no ha hecho más que mejorar y subir su caché a base de goles y minutos de calidad.
Delantero total
Aleksandr Kokorin es el delantero total. Tiene muchas habilidades y virtudes que aportan mucho a su equipo. La primera de ellas es la definición. Kokorin posee un tiro endiablado que perfora porterías. Además de tener muy buen disparo es eficaz, ya que suele marcar gol por partido tirando dos o tres veces solo. Otro de sus fuertes es la velocidad. El delantero ruso la utiliza para jugar mucho al espacio, rompiendo líneas defensivas y dando siempre opciones de pase a sus compañeros. Kokorin siempre está ayudando al equipo, debido a su gran juego aéreo, el equipo puede lanzar balones largos con garantía de que el delantero los vaya a ganar. Además, es un jugador parecido a Vela en el sentido de saber provocar muchas faltas y tarjetas. Aún así, su falta de disciplina le juega malas pasadas en muchas ocasiones, por ejemplo quedándose apartado de la selección por el nuevo seleccionador.
Enchufado
El delantero ruso ha arrancado con fuerza y determinación esta temporada 2017-2018. Sus números a 30 de agosto son brutales. Ha marcado nueve goles y ha dado dos asistencias en los 12 partidos oficiales del Zenit, incluyendo las dos previas europeas en las que ha sido el héroe. De los ocho encuentros de liga disputados hasta el momento, solo no ha visto puerta en dos, ante Rubin Kazan, que dio asistencia, y Rostov, que el partido acabó 0-0.
En anteriores temporadas, su rendimiento ha sido bueno, pero su números goleadores más normales. En la 2014-2015, aún en el Dinamo Moscú, marcó diez goles en 39 encuentros oficiales y dio siete asistencias. El Zenit se fijó en él y en su primera temporada en San Petersburgo marcó ocho goles y dio tres asistencias en 24 encuentros.
Su última temporada fue dura, por el rendimiento del equipo que a punto estuvo de quedarse fuera de puestos europeos, pero rindió a buen nivel en gran parte del curso. En Europa League marcó cuatro goles en ocho partidos siendo el líder del equipo. Sin embargo, entre Copa, Supercopa y Premier Liga Rusa, solo consiguió seis goles en 30 partidos. Aún así, parece que Kokorin ha renacido y será el pilar fundamental de un equipo plagado de nuevos jugadores.