Los hombres de Muñiz volvían a los entrenamientos en un día lluvioso y frio en la Ciudad Deportiva de Buñol, aun así las condiciones climatológicas adversas no fueron suficientes para quitar la ilusión a los jugadores, que venían de empatar 2-2 ante todo un Real Madrid.
El Levante, pasada ya la épica gesta ante el Real Madrid, ya se prepara para jugar el derbi de Valencia. Las únicas ausencias en el entrenamiento matutino han sido el colombiano Jefferson Lerma y los lesionados de larga duración, Iván López y Raúl Fernández.
El mediocentro colombiano ha comenzado la recuperación de la microrrotura en el bíceps femoral que se produjo en el transcurso del encuentro ante el Real Madrid en el Ciutat. Lerma ha trabajado en la sala médica de las instalaciones de Buñol al igual que lateral valenciano y el arquero vasco.
El resto del equipo, se ha entrenado con normalidad durante una hora y media en las instalaciones de Buñol, para preparar el derbi del domingo, el cual como todo derbi genera una ilusión y expectación especial tanto en aficionados como jugadores y más sumándole, la confianza de haberle jugado al Real Madrid de Cristiano Ronaldo de tú a tú.
En el entrenamiento se ha podido observar continuamente ejercicios con balón y a los delanteros como Roger, Boateng y el recién llegado Pazzini realizar ejercicios destinados a mejorar la finalización a portería. El Albanes Sadiku, en cambio todavía está ultimando su puesta a punto al margen del grupo al final del entrenamiento.
Sin embargo, una buena noticia es la incorporación de Toño y Rochina en los entrenamientos con el resto del grupo. Toño se lesionó en el partido de vuelta ante el RCD Espanyol, partido que se saldó con derrota granota por 0-2. Rochina en cambio ya ha acabado la puesta a punto, a la que se le sometió tras su llegada del Rubin Kazan ruso, donde no había dispuesto de minutos.