Una bestia pisó Turín y sin contemplaciones, aplastó toda esperanza bianconeri. Voló hasta la altura del larguero para fusilar con un golpe limpio, ese que desató la ovación más admirable de la historia del fútbol europeo, pues llegó de parte de la hinchada rival

Unos le llaman el 'bicho', otros son más precisos en sus calificaciones. "Nunca he visto a alguien con su instinto asesino", confesó Buffon para referirse a un Cristiano Ronaldo imparable e insaciable.

Era su noche, aunque ya van unas cuantas. Le da igual que sea Madrid, París o Turín. El máximo goleador de esta edición de Champions se siente extraterrestre cada vez que escucha ese himno tan motivador, emocionante y que alegra hasta al más frío Benzema, con la excepción de ayer.

La chilena tan ansiada y unos aplausos únicos

Demasiado estaba tardando en llegar para un futbolista tan ambicioso, al que nada se le resiste cuando se habla de marcar. Carvajal puso un sutil centro, bombeado y al lugar perfecto. De espaldas a la portería, el recurso ideal era una chilena.

Cristiano Ronaldo por fin le salió, después de intentos fallidos en otros encuentros. Sus más de dos metros de vuelo en el brinco le permitió enchufar la bola con una precisión de cirujano para que se colase suavemente a la derecha.

La mirada del mítico arquero lo dijo todo. Buffon prefirió no estirarse para un imposible y ver al detalle la obra maestra del portugués, que lo celebró como siempre pero se llevó una grata sorpresa: todo el estadio le ovacionó, uniéndose los italianos a los dos mil madridistas de la zona visitante. Cristiano daba las gracias en un momento único para él.

El portugués se muestra agradecido por los aplausos de toda la grada I Foto: Real Madrid
El portugués se muestra agradecido por los aplausos de toda la grada I Foto: Real Madrid

Sin embargo, las cámaras captaron otras reacciones a tremendo gol, como el asombro de Zidane en la zona técnica echándose las manos a la calva y moviéndo la mano en expresión de qué barbaridad. Isco, sonriente y con la mano a la testa. Barzagli, con ambos brazos extendidos en señal de qué hacer contra eso.

Esa chilena tan ansiada por el luso fue una realidad cuando el Real Madrid necesitaba el segundo tanto que apagase la motivación con la que había salido tras el descanso la Juventus. Así, Cristiano Ronaldo es el primer y único futbolista de la competición europea que ha logrado marcar durante nueve partidos consecutivos. El portugués lleva 14 goles en total. Aten a la bestia.

Marcelo, Isco y Benzema, protagonistas en un choque con menú completo

Hacía tiempo que no se veía un partido de Champions así. Raciones de fútbol, polémica, faltas desmedidas, tarjetas, paradones e imágenes anecdóticas como la que protagonizó Marcelo. Si su samba brasileña apareció en el tercer tanto madridista con una jugada de las suyas entre regates, pisadas y un toque magnífico para finiquitar en línea de gol, ese arte del lateral se trasladó a un libre directo.

Dybala se disponía a chutar muy cerca del área, pero escondido tras la barrera estaba un Marcelo agachado con las rodillas flexionadas, en aras de evitar un disparo raso que sorprendiese a su portero. Curiosa e inédita acción, tanto como el rostro de Bale en el banquillo, sin festejar el primer gol de su equipo. El galés no jugó ni un minuto.

Dybala dispara y Marcelo permanece arrodillado tras la barrera I Foto: Real Madrid
Dybala dispara y Marcelo permanece arrodillado tras la barrera I Foto: Real Madrid

Lucas y Asensio estuvieron por delante en las sustituciones, acompañando al centenario Kovacic, que sin llamar mucho la atención sumó su partido número 100 como madridista. Pero el gran beneficiado fue un pletórico Isco.

El técnico apostó por él y respondió como mejor sabe: asistencia para el tanto del 'bicho' a los cuatro minutos de juego. Además, la jugada merece mención especial por los dos caños que sufrieron los defensores italianos en los pases previos al remate final.

No quedó ahí el recital del malagueño, que sacó su varita para un 100% de precisión, pues logró un pleno de aciertos pasando la pelota (57/57). Se movió entre líneas, combinó y dio mucho juego al equipo. Incluso robó un balón que pudo costar caro al conjunto bianconeri. Anduvo el triple de fino que Benzema, que abandonó el choque a los 58 minutos

Isco durante el partido en Turín I Foto: Real Madrid
Isco durante el partido en Turín I Foto: Real Madrid

Ni lesión ni otra historia que no fuese su mala actitud, escasa energía y acierto. El peor del 0-3 fue el galo, sustituido sorprendentemente en el movimiento más tempranero de Zidane, acostumbrado a introducir cambios mucho más tarde. Detectó a tiempo el bajón de su nueve.

Una estrella transformada en agujero negro

Pero para bajón el de Paulo Dybala, expulsado poco después de la bestial chilena en un partido para reflexionar. Una patada alta al pecho de Carvajal le costó la segunda tarjeta y de nada le sirvió levantar la mano en señal de mea culpa. Sin embargo, lo malo fue su primera amonestación: claro 'piscinazo' en área rival con gesto de derribo bien ejecutado, que concienció al árbitro Cakir para la amarilla. En otras acciones actuó de forma similar y la estrella argentina acabó oscurecida.

Paulo Dybala se marcha cabizbajo tras su expulsión I Foto: Real Madrid
Paulo Dybala se marcha cabizbajo tras su expulsión I Foto: Real Madrid

La luz la puso, otra vez y no por ello menos importante, Keylor Navas. Sus tres paradones al propio Dybala e Higuaín le permitieron mantener a cero su meta. En una reacción a bocajarro con salto felino certificó su enorme nivel. ¿Quién quiere a otro portero viendo al 'tico'? ¿Quién quería jubilar ya a Cristiano Ronaldo? ¿Quién dudaba de este Real Madrid en su torneo favorito?

El camino hacia la décima tercera sigue siendo plácido, aunque falte la vuelta, donde no estará Sergio Ramos, por cierto. Vio su quinta amarilla y dejará su puesto a Vallejo por la lesión de Nacho.

Sergio Ramos protesta al colegiado la tarjeta amarilla I Foto: Real Madrid
Sergio Ramos protesta al colegiado la tarjeta amarilla I Foto: Real Madrid

Por parte italiana, quizás Allegri tampoco repita con Asamoah, que soltó un feo manotazo en la cara de Carvajal. Pero eso en el área no se pita tanto. Así, el trepidante duelo tuvo hasta polémica, esa que ha dejado de generar una bestia lusa muy viva a sus 33 años. Pónganse en pie.