El Rayo Vallecano, por tercera semana consecutiva, ha vuelto a entrenar a puerta cerrada. Desde que se ha impuesto esta dinámica, no han conseguido ni ganar al Atlético de Madrid en Vallecas (0-1), ni al Getafe en el Coliseum Alfonso Pérez (2-1). Pero Míchel no se rinde y, siguiendo el tópico de que a la tercera va la vencida, buscará cambiar una dinámica negativa ante el Girona.

El Rayo se ejercita poco más de 24 horas antes de recibir al Girona

El Girona llega tras una victoria en el Santiago Bernabéu y un empate en Montilivi ante la Real Sociedad, unos resultados que motivan a los de Eusebio a viajar con la ilusión de conseguir llevarse de vuelta los tres puntos de Vallecas. Para recibir a un equipo que llega con la moral alta, los de Míchel han realizado la última sesión de entrenamiento en la mañana del jueves en la Ciudad Deportiva a partir de las 11:00 horas. Posteriormente el propio técnico madrileño ha hablado ante los medios para contestar a las preguntas referentes al partido.

Durante la sesión, la plantilla realizó activación, transferencia de conceptos tácticos en diferentes espacios, con fútbol a campo completo para terminar. El club, en el comunicado del entrenamiento, al margen de que Uche sigue sin estar disponible, como Míchel ha adelantado, no ha dado detalles de si ha habido algún tipo de contratiempo de última hora, por lo que la lista de convocados puede tener sorpresas.

Mario Suárez durante un entrenamiento | Fotografía: Rayo Vallecano S.A.D.
Mario Suárez durante un entrenamiento | Fotografía: Rayo Vallecano S.A.D.

El propio Rayo Vallecano ha anunciado que la lista de convocados no se hará pública hasta el viernes, pocas horas antes del partido, de cara a no dar pistas a un Girona que sí ha dado a conocer la expedición que viajará hasta Vallecas. Una final para los de Míchel en la que contarán con su afición incondicional, y los de Eusebio buscarán continuar la racha y alcanzar el tercer encuentro consecutivo sin conocer la derrota. El duelo que tendrá lugar a partir de las 21:00 horas en el barrio humilde de Madrid, pase lo que pase, puede ser de aquellos que se recuerden a final de temporada.