Este periodo de fichajes está siendo muy veloz para el Celta, ya que pocos puestos quedan por cubrir cuando apenas acaba de comenzar la pretemporada. Si se añade a esta celeridad en las contrataciones, que el Celta ha sido capaz de firmar a futbolistas de gran calidad y que despiertan en la afición una gran ilusión, se puede afirmar que se trata de uno de los mejores mercados veraniegos en Vigo en los últimos años.
Sin embargo, una de las piezas que falta en este equipo no llegará tan rápido como cabía esperar, ya que el Sevilla no está dispuesto a deshacerse de Nolito por menos de 2,3 millones de euros, que es el plazo que le queda pendiente de abonar al conjunto hispalense por haber firmado al gaditano desde el Manchester City, mientras que el Celta pretende que el delantero andaluz llegue a coste cero.
Si bien el gaditano no tiene por delante una proyección futbolística ilusionante como Aidoo, Sáenz o Gabriel Fernández por su edad, ni es fruto de la cantera como Mina o Denis, su contratación es muy deseada por todos los aficionados gracias al gran rendimiento en su etapa celeste anterior y a su compromiso con el equipo. Además de con la hinchada, parece que Nolito también mantiene un idilio con la tierra gallega, pues en numerosas ocasiones ha manifestado que se sintió como en casa en Galicia.
Si se vuelve la mirada hacia su actual equipo, se encuentra que su nuevo entenador, Julen Lopetegui, asegura no contar con Nolito y además su conjunto ha cerrado nueve incorporaciones, cuatro de ellas en la parcela atacante, por lo que debe comenzar a desprenderse de jugadores, y todo apunta a que, a partir del 26 de julio, fecha en la que el Sevilla vuelve de su gira americana, se sucederán las salidas de futbolistas.
Esta operación sigue encuadrada en el plan inicial anunciado por Mouriño de contar con gente comprometida y contrastada para reforzar al Celta tras la decepcionante temporada pasada. Serán los resultados los que coloquen al Celta en la tabla clasificatoria, pero tras estos fichajes, la afición ha recuperado la ilusión y encarará la temporada de una manera muy diferente a cómo se despidió de la última.