Pep Segura fue repescado por el Barça en el año 2015 de la mano del presidente Josep María Bartomeu. Por aquel entonces, Segura, ostentaba el cargo de secretario técnico del fútbol formativo profesional. Aunque dos temporadas después, tuvo un ascenso que lo elevó a lo más alto de la dirección deportiva. Por lo que se convirtió en el mánager general del club. En su nuevo cargo, prácticamente estaba un escalón por encima del director deportivo de aquel año, Robert Fernández. 

Los dos últimos fracasos en competición europea, y la falta de jugadores de la cantera en el primer equipo llevó al presidente, Josep María Bartomeu a hacer una profunda remodelación en el organigrama del club. Entre otros, han llevado al propio Bartomeu a ocupar también la vicepresidencia por la marcha de Jordi Mestre, e incluso, a recuperar a Victor Valdés para ser el entrenador del Juvenil A. Esta semana, ya era conocida la intención de Pep Segura de abandonar el Barça, aunque su renuncia no se hizo oficial hasta que Patrick Kluivert fue nombrado como director del fútbol formativo.

La eliminación de la Champions en Roma en el año 2018 dejó en una posición comprometida a Robert Fernández. La unidad 'B' del equipo no podía competir contra un once titular bien definido. Paulinho y Semedo tenían un gran nivel, pero quizá les faltó dar un poco más para ser titulares. Por otro lado, los fichajes de Yerry Mina, André Gómes o Gerard Deulofeu que no tuvieron su mejor época como azulgranas fue clave para ver que las decisiones de Robert, supervisadas por Segura no mejoraron en exceso al equipo. Aun así, con el doblete de Liga y Copa, Pep Segura fue el encargado de asumir la responsabilidad de relevar a Robert Fernández de su cargo y apostar por un nuevo proyecto.

En esta última temporada 2018/19 se encomendó el puesto de la dirección deportiva al ex futbolista francés, Eric Abidal, acompañado del ex director deportivo del Getafe, Ramon Planes. Con ambos en la parcela deportiva, el Barça consiguió dar salida a varios futbolistas que llenaron las arcas del club para acometer diferentes fichajes. Arthur, Lenglet, o Vidal han sido claves durante esta temporada, donde han dado un rendimiento mejor del esperado. Sin embargo, las altas invernales de Jeison Murillo y Kevin Prince Boateng no aportaron a la plantilla y jugadores como Gerard Piqué o Luis Suárez tuvieron que jugar más minutos de los deseados por no haber repuesto de garantías en el equipo. Uno de los principales señalados fue Pep Segura. El manager general del club es el primer responsable de la parcela deportiva y, junto con el presidente,  es quien da luz verde tanto a las altas como a las bajas. Por lo que su labor en el club estuvo en entredicho, sobretodo con las contrataciones invernales de Murillo y Boateng.

La eliminación ante el Liverpool activó la alarma en Can Barça. Aún no se entiende cómo dos temporadas consecutivas donde los culés tenían ventajas holgadas ante sus rivales (Roma y Liverpool), pudieron perder por goleadas en las vueltas de dichas eliminatorias. Parte de la directiva lo asocia a que la plantilla no estuvo lo suficientemente compensada como para que en el tramo final de las competiciones las rotaciones pudieran tener a todos los jugadores frescos.

Prueba de ello, son los fichajes de Frankie de Jong y Antoine Griezmann, dos crakcs que llegan para reforzar dos posiciones estratégicas , como son el centro del campo y la delantera. La intención del club es rejuvenecer una plantilla que tiene una base de jugadores importantes en el once que ya supera la treintena. Por el momento, está previsto que tanto Eric Abidal como Ramón Planes, estén solos en la dirección deportiva.