El Real Madrid perdió su partido frente al Manchester City, fue un final de encuentro muy poco esperado. Parecía que tras el gol de Isco el partido iba a acabar ahí y no pasaría nada más, pero no; el Real Madrid dejó escapar en unos cinco minutos su partido y complicarse, y de qué manera, el pase a cuartos de final de la UEFA Champions League.

Se ha hablado mucho sobre la actuación arbitral, pero la realidad es que, aunque se hable de polémica, el principal responsable de lo que ocurrió no fue el árbitro, sino el club blanco.

No se sabe muy bien qué pasó exactamente, nadie lo puede explicar, pero la realidad es, que en cinco minutos, el Madrid concedió dos goles, un penalti y una expulsión. Los de Zidane no supieron dormir el partido tras el 1-0 y, al final, el Manchester City se acabó llevando el encuentro. 1-2 es el resultado que el Madrid dejó que se llevara del Santiago Bernabéu.

No se puede decir que la eliminatoria esté acabada, sí que está complicada, pero cuando se trata del Real Madrid y de la UEFA Champions League, nada se puede dar por hecho. El conjunto blanco lo va a tener muy difícil, tendrá que anotar mínimo dos tantos y que el conjunto inglés no consiga marcar gol. Courtois, que fue el mejor del partido junto con Vinicius, tendrá que realizar otra actuación magnífica e intentar dejar su portería a cero y confiar en sus compañeros para que consigan meter gol.

El Real Madrid, inexplicablemente, dejó escapar el partido en el Bernabéu cuando lo tenía controlado. Muchos, como se comentaba anteriormente, culpan al árbitro, por dar por legal el gol de Gabriel Jesús, donde se pedía falta previa sobre Ramos y, posteriormente, la expulsión del central sevillano, donde se dice que no fue suficiente para pitar falta. 

El conjunto de Zidane tiene por delante, en principio, 90 minutos para darle la vuelta al encuentro y poder pasar a los cuartos de final de la UEFA Champions League.