El partido que encarará el equipo de Jagoba Arrasate está previsto para dentro de dos semanas, por lo que sus pupilos están dándolo todo en los entrenamientos para encarar de la mejor manera posible este final liguero.
Antes este parón el club navarro se encontraba en onceava posición de la tabla, con 34 puntos. Los rojillos tienen muchas fortalezas, entre ellas la intensidad, siempre pelean cada balón como si fuera el primero. Es un equipo muy unido, con muy buena comunicación sobre el terreno de juego. Estos cuentan con su una delantera muy buena, Candona, Adrián, Enric Gallego, Arnaiz y el Chimy Ávila son una explosión cuando saltan al verde. A pesar de que el ‘Comandante’ se encuentre en horas bajas, ya que aún sigue trabajando el solitario su recuperación.
El club navarro debe esforzarse más en sus puntos débiles, la defensa y la portería son los engranajes que dan más fallos al sistema. Aunque Rubén y Sergio Herrera han mostrado un buen nivel, aún queda mucho por pulir bajo los palos rojillos. En las espaldas de la defensa Aridane deja mucho espacio normalmente, porque sube mucho el balón y en ocasiones se arriesga demasiado. Estupiñán y Nacho Vidal son muy ofensivos y tienen una gran capacidad de ataque, pero fallan en la defensa muchas veces.
Aunque lo que se ha podido apreciar en los entrenamientos evidencia que los rojillos se están preparando para dar el cien por cien en el campo y remar hacia la victoria en este final de Liga tan convulso. Pese a no contar con el aliento de su afición en El Sadar, los pupilos de Jagoba Arrasate buscarán sentir cerca a su parroquia, lo que, sin duda, supondrá un impulso extra.