El mercado de fichajes del Celta de Vigo ha sido de todo menos ilusionante. Sin embargo, en el equipo han emergido una serie de jugadores, muchos de ellos de la cantera, que ilusionan (y mucho) al celtismo. La novedad llegó a principios de la pretemporada cuando un jugador, no canterano y no recién fichado, comenzó a llenar las esperanzas de los aficionados. No es otro que el extremo turco Emre Mor.

Por todos es conocido el entusiasmo con el que los vigueses recibieron su llegada, pues era un jugador llegado de un enorme equipo como el Borussia Dortmund que destacaba por su excelente calidad técnica. Sin embargo, el jugador no consiguió hacerse con la titularidad y no supo aprovechar los minutos que le dieron. Esto desembocó en el descontento de la grada y en dos cesiones del jugador, una al Olympiakos y otra al Galatasaray, donde sufrió la misma suerte.

El ilusiómetro a reventar

La sorpresa llegó en los primeros partidos que el Real Club Celta organizó para la pretemporada. Durante el primer encuentro contra el Real Oviedo, se veía a leguas un cambio físico a mejor en el joven extremo, además de rumorearse una mejoría en su actitud, su mayor lastre hasta la fecha. En ese mismo partido, el jugador turco anotó un golazo que rompió todos los “ilusiómetros” de los celtistas.

Llegó el siguiente partido, contra el CD Lugo, y el jugador volvió a marcar. Emre Mor se había convertido en una realidad. Conforme inició la temporada siguió dando muestras de su calidad y se convirtió en uno de los jugadores revelación de las primeras jornadas de liga.

Pérdida de protagonismo, otra vez.

A pesar de todo, llegó el séptimo partido liguero y Emre fue relegado al banquillo. No sabemos si por rendimiento, por actitud o tararear el himno del Deportivo, pero el caso es que no ha vuelto a recuperar la titularidad en los últimos encuentros: ni contra Osasuna, ni contra el Atlético, ni contra el Levante.

Entre Santi Mina, Denis Suárez y Nolito, el bueno de Emre no ha gozado de todos los minutos que le hubiesen gustado, lo que ha desembocado en uno de sus ya conocidos mensajes enigmáticos en su cuenta de Instagram, como si del mismísimo Pione Sisto se tratase. “#Irrompible”, publicaba en una “storie”.

La publicación de Emre Mor. | Foto: Instagram.
La publicación de Emre Mor. | Foto: Instagram.

Las dudas de si el joven turco está preparado para jugar en el Celta vuelven a abundar en las dudas del celtismo, aún sin conocer a ciencia cierta qué fue lo que le quitó la titularidad. Ahora la pelota está en el tejado del jugador, que debe decidir si esperar su oportunidad trabajando duro o si prefiere volver a perderse en la sombra del jugador que pudo ser y que, quizás, su cabeza nunca le permitió llegar a convertirse.