Tras el 4-1 en Mestalla, al Real Madrid se le agravan dos problemas serios en la plantilla: Marcelo e Isco. Jugadores que, pese a los intentos de Zidane, no parecen levantar cabeza.

Marcelo, que ha sido uno de los mejores laterales izquierdos del mundo durante muchos años, ahora no es ni la sombra del jugador que fue. Y en el caso de Isco que, si bien, nunca ha demostrado una continuidad en su juego, ni se ha hecho titular indiscutible, si que ha sido el número 11 y ahora a penas juega de suplente.

Si nos remontamos unos años atrás, cuando se ganó La Decimotercera y tras la salida de Zidane del equipo, en ese momento ambos jugadores estaban en buena forma. Luego con la llegada de Lopetegui y Solari, los dos jugadores se convirtieron en suplentes habituales y en cada partido que se les daba la oportunidad quedaban señalados. 

Después, con el regreso del técnico francés al banquillo blanco se abrió un hilo de esperanza: ¿podría Zidane recuperar a los dos jugadores?

Por ahora, la respuesta es un rotundo NO. Y no parece que vaya a cambiar durante esta temporada.

En el caso de Marcelo, todos los partidos que ha disputado como titular en el Real Madrid han terminado en derrota, en total 9. El jugador brasileño ya sabe que no es imprescindible. De hecho, probablemente esta sea su última temporada en el equipo blanco, y puede que esta sea la razón por la que el futbolista ya no esté concentrado en llegar a su mejor forma. 

En cuanto a Isco, no mejora demasiado su situación con respecto a la del carioca. De todas las derrotas en las que Marcelo fue titular, Isco lo fue en 5. Además, cuando está en el campo no aporta el fútbol que se le recuerda, no tiene chispa y tampoco es capaz de dar el último pase. Cualidades que se le piden a un jugador de su nivel.

El problema que tiene Zidane es que no puede confiar en ellos, ni como titular, ni como suplentes. Para un entrenador que sus mejores resultados se han dado cuando la plantilla tenía una buena profundidad de banquillo. 

Por estas razones, es muy probable que ambos jugadores abandonen el equipo a final de temporada. Ahora toca poner cabeza hacia el futuro y pensar en sus posibles relevos. ¿Logrará Odegaard hacerse un hueco? ¿Recuperará el Real Madrid a Reguilón o Achraf?