El encuentro empezó con un ligero dominio de los visitantes sobre el balón, ya que a la Real le estaba costando salir jugando desde atrás, algo poco común sabiendo como se suele jugar en la ciudad gipuzcoana. Tras 20 minutos del inicio, empezaron a llegar las ocasiones más claras de la primera parte; un pase de Carrasco por encima de la línea de defensa de la Real no llegó lo bien que pudo llegar gracias al mediocentro donostiarra, Martin Zubimendi, que tocó lo justo para que Suárez no pudiese hacer el primero. La segunda ocasión también fue para los visitantes, tras un córner en el minuto 28 sacado por Lemar pudo rematar Hermoso difícilmente, un remate que parecía ir a la red blanquiazul, pero Nacho Monreal pudo despejar para llegar 0-0 al descanso.
En cuanto empezó la segunda parte, el colegiado Cuadra Fernández pitó una falta a favor del Atlético en campo rival; falta que traería el primer gol de la noche. El golpe de castigo lo sacó el belga Carrasco, que gracias a su prodigiosa diestra, puso el balón a la perfección a la altura del punto de penalti, para que el defensa Mario Hermoso rematase a su merced, y así, abrir la lata en el minuto 48.
Vista la situación del partido, ambos entrenadores aprovecharon para empezar a hacer cambios. El primer cambio fue el de los colchoneros, cambiando al delantero Correa por el mediocentro Saúl; y por parte de la Real, Barrenetxea por Merquelanz y William José por Isak. Cambios que inclinaban el partido de cara para el posible empate que podría llegar.
El encuentro se empezó a poner cuesta arriba para el equipo txuri - urdin, ya que el belga Carrasco andaba desatado por la banda izquierda, haciendo mucho daño a Gorosabel con varias llegadas al área por su carril. Así, en el minuto 74 llegó el segundo y último gol de la noche; Carrasco controlando el balón en su banda izquierda doblándola a Koke, éste puso un centro al área y tras unos cuantos rebotes le cayó el balón a Marcos Llorente, que fue quien puso el balón al fondo de la red.
Al próximo minuto del gol, el entrenador de Orio decidió hacer los últimos tres cambios que le quedaban a la vez, aprovechando los últimos quince minutos para los menos habituales Roberto López y Bautista, y para el ya recuperado Aritz Elustondo. Los jugadores que tuvieron que abandonar el terreno de juego fueron Gorosabel, Portu y Silva, que se empezaba a notar el cansancio acumulado.
Aún teniendo el partido prácticamente perdido, los jugadores donostiarras no dejaron de luchar hasta el final, creando peligro hasta el último instante. Como ejemplo se puede tomar la falta que lanzó el extremo Merquelanz, un zurdazo con mucha potencia que tuvo que despejar Oblak.
Con esta derrota, la Real Sociedad sigue sin levantar cabeza desde hace exactamente un mes, cuando el 22 de noviembre ganaron al Cádiz con gol de Isak. Éste último mes el conjunto txuri - urdin ha tenido que afrontar nada más y nada menos que nueve partidos, un mes de mucho desgaste para los jugadores de Alguacil, y eso al final se ha visto en los resultados, ya que no han podido ganar ninguno de estos nueve partidos.