Si miramos las estadísticas, los últimos partidos, el estado de forma o la plantilla, este duelo lo debería ganar el Real Madrid, que llega como primer clasificado de LaLiga, con sus dos delanteros haciendo una dupla imparable y con una racha casi impoluta de victorias. Pero este enfrentamiento no es como los demás, esto es un Real Madrid-Barça, un duelo donde las fuerzas se igualan y solo se conoce cómo empieza el partido, pero donde es imposible adivinar como concluirán los noventa, o incluso ciento veinte minutos.
El Barça vacía la enfermería
No todo son malas noticias para Xavi Hernández, que cruza los dedos para poder contar con la mayor parte de su plantilla, y es que entre las lesiones y el covid no está teniendo un respiro el técnico catalán, que apenas ha podido estrenar su once de gala y quien espera recuperar hombres tan importantes como Araújo o el tan ansiado Ansu Fati.
Con quien también contará es con Ferrán Torres, que viajará a Arabia Saudí tras dar negativo en la última prueba. Será el primer partido oficial del futbolista valenciano, que al fin ha podido ser inscrito y pasará a formar parte de la plantilla, formando una delantera muy prometedora con nombres como Ansu, Dembelé o Depay.
Quien también estará es Luuk de Jong, y es que el neerlandés ha sido el faro del Barça estos dos últimos partidos, siendo el único goleador del equipo. Parece que Xavi al fin ha sabido dar con la tecla e insuflar la confianza necesaria al delantero, de quien todo indica que se quedará al final en Barcelona hasta el cierre de temporada.
Dani Alves y Ter Stegen
Otra de las claves será la defensa, donde hace una semana debutó Dani Alves, dando la razón a todos aquellos que aclamaban su fichaje. No ha perdido nada de su técnica el brasileño, y ya reparte asistencias como hace algunos años. Su inteligencia también está intacta, y es que allí donde no le llegan las fuerzas al lateral, un espectacular posicionamiento táctico le permiten seguir sumando a su equipo.
Ter Stegen también va recuperando la sonrisa, y no es poca noticia. El guardameta alemán, que está firmando una mala temporada, enfila la Supercopa habiendo recuperado gran parte de su nivel, y siendo decisivo por fin como frente al Mallorca. Se enfrentará a la mejor dupla europea del momento, por lo que puede acumular un gran número de paradas.
La amenaza blanca: Benzema y Vinícius
Todo esto puede quedar eclipsado ante las dos armas con las que cuenta Carlo Ancelotti: Karim Benzema y Vinícus Júnior. Aquí es donde entra en juego la estadística, y es que todos los números avalan al Real Madrid. La dupla blanca llega 29 goles en liga, una cifra más que notable, pero que contrasta y de qué manera con los 31 que lleva todo el Barcelona, solo dos goles más que una parte de la delantera blanca.
Si se revisa el último encuentro, producido en el Campo Nou, aparece una exhibición de Vinícius, que ya ha demostrado que es imparable en campo abierto. Las defensas sufren mucho con él, por lo que el Barça tendrá que poner todo su empeño en parar al joven brasileño. Para esta complicada misión, Xavi necesita contar con Araújo a toda costa, ya que Eric García sí que tendrá que parar.
Posibles onces
Este gran partido parece que ha esquivado las bajas, y es que el Barça podrá contar con hombres claves como los mencionados Ferrán, Ansu y Araújo. También se ha recuperado ya de su elongación Frenkie de Jong, que se crece en estos duelos y demuestra la clase de futbolista que es, a pesar de su irregular temporada. Xavi saldrá con Ter Stegen en portería; línea de cuatro con Dani Alves, Araújo, Piqué y Jordi Alba; centro del campo con Busquets, Gavi y de Jong; delantera formada por Depay, Dembelé y Ferrán.
Por su parte Ancelotti no especulará ni hará innovaciones, y es que la única duda será si puede contar con Carvajal para el lateral derecho, que parece ya recuperado. En el resto de posiciones, el equipo de memoria, el 4-3-3 con Courtois en la portería, Alaba y Militão de centrales, Mendy en el lateral, la CMK en el centro del campo, y arriba el tridente Vinícus-Benzema-Asensio.
Partido grande el que se disputará en Arabia Saudí, con el peor Barça de los últimos veinte años y un Madrid al que nadie le corta las alas. Partido donde cualquier resultado es inimaginable, y donde a buen recaudo ambos conjuntos regalarán una noche de mucho fútbol, donde las emociones están aseguradas y donde finalmente, no pasará el que mejor racha lleve, sino el que mejor juegue a lo largo de los noventa minutos.