El Benito Villamarín trae en los últimos años buenos recuerdos al Deportivo Alavés. Los babazorrros han conseguido llevarse los tres puntos en sus dos últimas visitas al feudo bético, en ambos casos cuajando excelentes partidos.

La pasada temporada el Alavés viajaba a Sevilla en la jornada 35 de Liga, con poco en juego más allá que la posición final en la clasificación. Los albiazules llegaban al encuentro ocupando la décima posición después de empatar a cero frente al Eibar. El Betis, por su parte, era 15ª tras perder en Bilbao.

Pellegrino sorprendía con su once titular, con una rotación casi total y una defensa de cinco jugadores con Vigaray y Raúl García en los carriles. Krsticic, Torres y Romero formaban en el centro del campo, mientras que la pareja encargada de los goles era la formada por Sobrino y Santos. El Betis, por su parte, salía con un once con sus mejores hombres. 

Sin nada en juego más allá de terminar la Liga de la mejor manera, el partido comenzó abierto y con ocasiones. En una de las primeras ocasiones llegó el gol del Betis, de la mano de Rubén Pardo. Córner botado desde la izquierda cuyo rechace manda a la portería el guipuzcoano tras rebotar en el hoy bético Feddal. El gol sentaba mejor al Alavés que al Betis, que comenzaba a tener más balón y ocasiones, pero que seguía por detrás en el marcador. Sobrino, por partida doble, estuvo cerca de hacer el empate. Poco antes del descanso Rubén Castro mandaba el balón al palo.

Éxtasis albiazul

La segunda parte comenzaba de la mejor manera posible para el Alavés. Krsticic conducía el balón ante la pasividad defensiva y con un buen golpeo bajo ponía el 1-1 en el marcador. El gol albiazul era el preludio de diez minutos mágicos en los que los albiazules marcaron dos goles y sentenciaron el partido.

El primero llegaba en el 53 de las botas de Sobrino, que no desaprovechaba un buen centro de Carlos Vigaray. Cinco minutos después otra vez el madrileño ponía el centro del segundo gol. Esta vez era Christian Santos el que mandaba el balón al fondo de las mallas. En poco más de quince minutos le había dado la vuelta el Alavés al partido.

Lo intentaba el Betis, pero todavía en estado de shock tras los tres goles encajados. Sin embargo, era el Alavés el que le ponía la puntilla al partido. Katai, que había entrado desde el banquillo diez minutos antes, conducía el balón desde la izquierda y con un amago de calidad superaba a Adán y ponía el definitivo 1-4 en el marcador.

El Alavés conseguía los tres puntos, algo que espera volver a lograr este sábado. Los papeles están cambiados esta vez, con los béticos con buen juego y sensaciones y los albiazules en los puestos de descenso. Los babazorros querrán aprovechar la mejoría experimentada con De Biasi y sumar su segunda victoria de la temporada.