17 de mayo de 2015. Sin saber muy bien cómo, el Barcelona del Tata Martino aún tenía opciones de alzarse con el título liguero. Para proclamarse campeón, tenía que hacer algo que no había conseguido en toda la temporada: ganar al Atlético de Madrid.
Al Barça se le había presentado la milagrosa oportunidad de poder salvar una temporada en la que todo lo que pudo ir mal, fue mal. Los problemas con el fichaje de Neymar, que provocó una grave crisis institucional a la que Rosell no pudo ni supo hacer frente, el más que cuestionado nombramiento del Tata Martino, los problemas fiscales de Messi, del que se decía que estaba pensando en el Mundial, el fallecimiento de Tito Vilanova solo tres semanas antes… Así, contra todo y contra todos, llegaban a la jornada 38 dependiendo de sí mismos.
Antes de comenzar el partido, vimos un Camp Nou que se vistió de gala. Casi 100.000 personas cantando el himno bajo un mosaico con los colores del Barça y de la Senyera. No había otra. Era día grande. Atrás quedaban los problemas, los disgustos y los errores. Los culés tenían 90 minutos para conseguir otro título liguero.
El partido, una síntesis de la temporada
El Tata dejaba en el banquillo a Neymar, que llegaba tocado, y a Xavi, algo que venía siendo habitual. El partido fue un resumen de la temporada de ambos equipos. El Atleti comenzó mordiendo y presionando, como ya había hecho en la eliminatoria que enfrentó a ambos equipos en Champions. El Barcelona, por su parte, salió desconectado, sin dar la sensación de estar en una final. Aun así, parecía que todo lo malo de la temporada se tornaba para dar un halo de esperanza con dos desgracias ajenas: Costa primero, que se resentía de su lesión en los isquios y veía peligrar muy mucho la final de la Champions contra el Real Madrid, y Arda Turan seis minutos después, tras un choque con Cesc, no podían seguir en el campo y fueron sustituídos. Y para colmo, antes de acabar la primera parte, Alexis, con un sensacional golazo, puso al Barça por delante en el marcador.
El Barça, después de todo, campeón al descanso
Se llegaba al descanso con 1-0. Los azulgrana, sin hacer gran cosa, eran campeones de Liga en ese momento. El Atleti, sin embargo, mejor y con más ganas, veía cómo se le escapaba el título liguero. Los intentos de Koke y Raúl García no conseguían premio y a más de uno se le pasaba por la cabeza aquel mote que, sin embargo, con el ‘Cholo’ quedó atrás: el ‘pupas’. A lo mejor con otro entrenador los colchoneros habrían bajado los brazos y podrían haberse dejado llevar por el escenario. Pero Simeone no estaba por la labor de dejar pasar una oportunidad como esa. A los dos minutos de comenzar la segunda parte, Villa estrelló un remate al palo, y cuatro minutos después, Godín, con un gran cabezazo tras un saque de esquina de Gabi, empató el marcador.
El resto es historia. El Barça quiso pero no pudo reaccionar. La ilusión se esfumó para dar paso a la realidad. El equipo no funcionaba y todo apuntaba a lo que muchos intentaban proclamar antes de tiempo: el fin de ciclo. Con todo y con eso, el Barcelona podría haber ganado el partido si Mateu no hubiese anulado un gol legal de Messi. Pero no era el día para quejarse. El Atlético salió campeón del Camp Nou con todo merecimiento, y todo el estadio se puso en pie para ovacionar al justo campeón de Liga.
Las cosas han cambiado
Cómo hemos cambiado, como decía la canción. Atrás quedó el Tata, Rosell, el Messi desconectado y el hedor a fin de ciclo inminente. Llegó Luis Enrique, llegó la MSN, y con ellos volvió la felicidad por Can Barça. Incluso este año llegó a la ciudad condal uno de los artífices de esa liga colchonera: Arda Turan.
Luis Enrique siempre ha ganado al Cholo como técnico del Barça
La eliminatoria que llega el martes no tendrá nada que ver con aquel partido. El Atleti mantiene el espíritu competitivo de entonces, y pese a tener posiblemente mejor plantilla que hace dos años, el nivel de los de Luis Enrique no tiene comparación alguna con el del Tata. El asturiano le ha ganado la partida en todas las ocasiones que se ha enfrentado a Simeone, y aunque no asegura nada, lo cierto es que parece tenerle tomada la medida a los colchoneros. Aun así, nunca se puede dar por ganado un partido contra los guerreros del Cholo.
En definitiva, nos esperan dos grandes partidos de los que saldrá sin duda uno de los máximos favoritos para acabar alzando la ansiada orejona. El Barça, a por la ‘sexta’ El Atleti, a por la ‘primera’.