El mundo del fútbol esperaba un nuevo hito de Leo Messi pero no pudo ser. El argentino se plantaba en el último partido de la fase de grupos con 9 goles, a dos de igualar la hazaña conseguida por Cristiano Ronaldo la temporada pasada con 11 dianas en esta fase. El argentino se quedó a las puertas, ya que marcó uno y cedió protagonismo a Arda Turan, que brilló con un ‘hat-trick’. Sin embargo contribuyó, y de qué manera, a que el FC Barcelona alcanza un logro que no se había visto jamás en la UEFA Champions League: superar los 1.000 pases en un mismo equipo.
No se había visto nunca y sólo el Barça podía hacerlo. Contra el Borussia Mönchengladbach los azulgranas consiguieron convertirse en el primer equipo en llegar a las 300 victorias en la máxima competición europea y además hacerlo con 1.029 pases, para ser exactos, de los que 930 acabaron bien. Es decir, un 90% de efectividad que sirvieron para liderar la machada ‘culé’.
Javier Mascherano, que celebraba sus 300 partidos oficiales con el club azulgrana, fue el jugador que más pases realizó con 137, de los que 131 acabaron encontrando destinatario. Al argentino le siguió Samuel Umtiti que de 120 que intentó un total de 115 acabaron bien. Ambos lograron una efectividad del 96% para cerciorar el buen momento de forma de la pareja de centrales azulgranas.
A la zaga defensiva se unió André Gomes, que logró combinar 125 pases de los 132 que intentó (95%). El portugués saltó al Camp Nou con la tarea de ocupar el lugar de Sergio Busquets y lo hizo con sobresaliente. No sólo fue efectivo sino que además lo consiguió con calidad y con una exquisitez suprema. Por otra parte Marc Cardona, que debutaba en Champions League una semana después de hacerlo en Copa del Rey, fue el jugador que menos realizó. Bien es cierto que el canterano apenas jugó 17 minutos para dar descanso a Arda Turan y solo pudo realizar cinco pases, de los cuales cuatro llegaron a buen puerto.