Tan negra como la camiseta que lucían fue la tarde que el Club Deportivo Leganés vivió en el RCDE Stadium. La tropa de Asier Garitano quería aprovechar el buen resultado cosechado ante el Osasuna y conseguir así prolongar la mala racha que esta temporada estaba teniendo el Espanyol en su feudo. Sin embargo, las cosas se torcieron demasiado pronto y los madrileños se acabaron marcharon de vacío de su visita a Barcelona.
La lesión de Jon Ander Serantes hundió los ánimos de los visitantes antes de la primera media hora de partido y, tras el descanso, los goles de Gerard y Piatti, por partida doble, hicieron que el 'Lega' viviese una auténtica pesadilla. Los de Quique Sánchez Flores, por su parte, lograron por cuarto partido consecutivo mantener a cero la portería custodiada por Diego López, además de regalar a su afición la primera victoria de la temporada en casa.
Pocos acercamientos y desgracia pepinera
Era el momento de dar un golpe en la mesa. Había que aprovechar los resultados cosechados por los rivales y escalar así posiciones en la clasificación. Con ese pensamiento, Espanyol y Leganés saltaron al terreno de juego. El todo o nada estaba en juego.
Asi, tanto pepineros como periquitos quisieron rápidamente hacerse con el dominio del juego. No obstante, el Club Deportivo Leganés tenía las ideas muy claras y, con una presión muy alta y tapando muy bien los espacios, consiguió que el juego se desarrollara en la parte del campo del Espanyol. Mientras, el equipo local buscaba armar la contra para lograr inquietar a Jon Ander Serantes.
No obstante, no fue hasta el minuto once cuando el combinado de Quique Sánchez Flores logró rematar un balón tras un córner. Sin embargo, el testarazo de Gerard se marchó por la línea de fondo. Parecía venirse arriba la tropa catalana, mientras que el Leganés volvía a mostrar la solvencia defensiva que le caracterizaba especialmente la pasada temporada. Pasaban cada vez menos cosas en el choque, por ello Gabriel se atrevió con un tiro lejano que bloqueó con facilidad el cancerbero local. El Espanyol respondió, poco después, con varios disparos que se toparon con la zaga madrileña.
Poco antes de cruzar la media hora de juego, volvió a aparecer la desgracia de las lesiones que desde hace algunas semanas asola Leganés. En esta ocasión fue Serantes el que, tras un despeje, cayó mal sobre el verde y se tuvo que marchar del partido por problemas en la rodilla. Así, Garitano no tuvo más remedio que hacer debutar a Brignoli.
Había poco juego en las áreas lo que hacía que el marcador mantuviese el cero a cero que reinaba desde el principio del enfrentamiento. La grada alentaba a los suyos, pero el choque continuaba siendo igualado y las llegadas eran cada vez más escasas. Poco antes del pitido que indicaba el final de la primera mitad, se animó el equipo del sur de Madrid, pero siguieron sin crear situaciones que acabaran entre los palos de Diego López. Unai López probó con la testa, pero el balón no acabó en el lugar esperado. Antes de la marcha de los protagonistas a los vestuarios, el Espanyol tuvo una oportunidad de oro, en la que el balón se paseó por el área de Brignoli, pero para su desgracia, nadie se atrevió a rematar.
Y llegaron los goles
Arrancaban los últimos 45 minutos de partido y nada más salir, el Espanyol logró adelantarse en el electrónico. Jurado colgó un balón que, tras un rechace, Gerard Moreno mandó a las redes de Brignoli sin que este pudiera hacer nada para evitarlo. Sin tiempo para recuperarse, el Leganés recibió, cuatro minutos después, el segundo tanto de partido que le cayó como un auténtico jarro de agua fría. En esta ocasión fue Piatti el que batió la portería blanquiazul tras un ataque que inició Gerard y que pasó por las botas de Baptistao antes de que Piatti perforara las mallas.
Omar Ramos tiró del equipo en la segunda mitad Los madrileños tendrían que remar a contracorriente si quería sacar algo positivo de su visita al RCDE Stadium. Omar Ramos tiró de los suyos haciéndose con un balón que Diego López le lanzó por error. No obstante, su zarpazo no acabó viendo puerta. El Leganés intentaba recuperarse haciéndose con el dominio del balón, pero las llegadas seguían siendo pocas, lo que dificultaba la remontada. El ‘23’ del equipo de Garitano volvió a probar suerte con un disparo que atajó con facilidad el que fuera portero del Real Madrid.
Víctor Díaz lo intentó poco después también con un disparo lejano que corrió la misma suerte. Asier Garitano, con claras intenciones de buscar rascar algún punto, decidió sacar toda la artillería que tenía en el banquillo. Así, Guerrero y Machis saltaron al césped y los sacrificados fueron Mantovani y un desafortunado Luciano, que poco había logrado hacer a lo largo del partido. No era momento de rendirse, aún no.
Sin embargo, el Leganés no respondió como su entrenador quería. No se acercó a la remontada y los cambios no surgieron el efecto deseado. Para más inri, Piatti logró a la contra anotar el tercer gol del partido a favor de los periquitos y el segundo en su cuenta personal. Esta última diana fue a la contra tras un excelente pase de Jurado. Poco se pudo hacer y finalmente, los visitantes se marcharon de Barcelona de vacío y con otra lesión más en su lista.