La plantilla del Levante retomó los entrenamientos en el día de ayer en las instalaciones de Buñol, en jornada matutina, desde las 10:30 horas, después de conseguir una nueva victoria en el Ciutat de València frente al Mallorca (2-1). Con esta van cinco en ese mismo escenario, mantiendo los de Muñiz la condición de invictos: pleno de victorias en los cinco partidos jugados. Los quince puntos obtenidos como local, unidos a los ocho (dos victorias, dos empates, una derrota) cosechados como visitante, permiten al Levante UD permanecer líder de LaLiga 1|2|3 con seis puntos de diferencia respecto al segundo clasificado, el Lugo.
La de ayer, fue una sesión de recuperación a la que el preparador azulgrana tiene acostumbrados a sus jugadores. De esta manera, los titulares en la cita ante el bloque balear han realizado un suave entrenamiento, que han completado con tratamiento de fisioterapia o con un trabajo personalizado en el gimnasio. El resto del colectivo ha aumentado la intensidad de las prácticas establecidas. Chema y Montañés se han ejercitado al margen del grupo, como medida de precaución: por un lado, el central se sometió después de la sesión a diferentes pruebas médicas, y habrá que esperar a ver su evolución el resto de la semana para evaluar con más certeza su estado físico. Por su parte, Montañés presenta un fuerte golpe en el pie y también habrá que esperar a su evolución.
La plantilla descansó hoy martes, y tiene previsto retomar los entrenamientos mañana miércoles en la Ciudad Deportiva, también en jornada matutina, algo que se repetirá en el mismo escenario y horario (10:30h) hasta el sábado incluído, siendo el compromiso liguero el domingo a las 18:00h en Miranda de Ebro (Burgos), concretamente en el Estadio Municipal de Anduva frente al Mirandés. Se trata de uno de los escenarios más complejos para cualquier equipo en Segunda División. No en vano, sigue invicto en su feudo, con tres victorias (Cádiz, Rayo y Tenerife), y dos empates (Getafe y Lugo).