Javi Guerra, con 'g' de gol

El ariete, tras cuatro partidos disputados, acumula tres goles en su cuenta particular y es el máximo goleador rayista. Con su llegada, la participación de Manucho y Miku se ha reducido de manera considerable, pero su rendimiento y eficacia ante la meta rival no dejan otra alternativa, y su titularidad es indiscutible.

Javi Guerra, con 'g' de gol
Fotografía: Adrián Ferro (VAVEL.com)
rafaelvara
Por Rafael Vara

El delantero goleador es una pieza en extinción en el fútbol actual que tan solo los equipos con gran poderío económico pueden permitirse. Jugadores como Luis Suárez, Aduriz, Cavani o Van Persie son cada vez más complicados de encontrar en el mercado, y son muchos los equipos que juegan sin delanteros puros que son capaces de alcanzar la veintena de goles. Un buen ejemplo de este tipo de jugadores son Alberto Bueno o Piti, que sin ser referencias ofensivas fueron capaces de golear una y otra vez con la elástica franjirroja.

Para desmentir esta obviedad, a Vallecas llegó el día 31 de agosto un clásico del fútbol español: Javier Guerra Rodríguez. Un 9 clásico, de los de toda la vida, de los que necesitan medio metro en el área para batir al portero rival, de los que sabe jugar de espaldas y que cada vez que salta al verde tiene entre ceja y ceja la portería del adversario. A sus 33 años, y tras un desafortunado paso por la Premier League, interrumpido por una cesión en el pasado mercado invernal al Málaga, vuelve a golear en la Liga española, esta vez con la casaca del Rayo Vallecano.

Tras un verano complicado, uno de los objetivos principales que tuvo Felipe Miñambres llegaba a la capital para complementar a Miku y Manucho, los otros puntas que tiene Paco Jémez en nómina. Tras llegar en el parón por partidos internacionales, el malagueño llegó directo al once en el duelo frente al Deportivo de la Coruña, aunque no estuvo muy afortunado y tuvo un debut discreto. Desde entonces, Las Palmas, Sporting de Gijón y Sevilla han sido víctimas de su olfato goleador, anotando tres tantos en otros tantos encuentros y colocándose como máximo artillero vallecano, sumando la mitad de los goles que llevan los franjirrojos en Liga.

Repasando su carrera deportiva, se puede observar un elemento común: ha goleado en todos los conjuntos en los que ha estado. En su etapa en el filial del Valencia, por ejemplo, sumó 43 goles en tres campañas, y tanto en el Granada 74, como en el Alavés y en el Levante siempre rozó o superó la decena de goles. Sin embargo, su etapa más fructífera como futbolista la vivió en Valladolid, equipo en el que jugó en la máxima categoría del fútbol español y en Segunda División, finalizando con 70 goles en 151 encuentros, unas cifras sensacionales. Por último, de su breve paso por el Málaga el año pasado destacaron sus 5 goles.

Otro dato que cabe destacar es que sus goles casi siempre suponen puntos para el Rayo Vallecano. Su primer gol fue en las Islas Canarias, y supuso el tanto de la victoria por 0-1 frente a un rival directo, y a la vez fue la primera victoria en Liga de los madrileños. Su segundo tanto vino acompañado de otro encuentro que vencieron los hombres de Paco Jémez. Su tanto, el del 2-0, ampliaba la ventaja  aunque un gol posterior del Sporting provocó nervios hasta el final, pero el 2-1 no se movió del marcador. Por último, su tercer tanto consecutivo sirvió para empatar de manera momentánea el choque frente al Sevilla, aunque al final los locales se acabaron imponiendo por 3-2.

En definitiva, en la próxima jornada frente al Betis el ex del Valladolid tendrá la oportunidad de continuar con su gran estado de forma, ampliando su racha goleadora a cuatro choques consecutivos, justo antes de otro parón de selecciones. Mientras tanto, Manucho y Miku seguirán esperando su oportunidad, pero el gol en Vallecas, por el momento, lleva el nombre y apellido de Javi Guerra.