Era el año de 2001 y la entonces World Wrestling Federation se encontraba en su mejor momento porque después de varios años de competir hombro a hombro con la World Championship Wrestling de Eric Bischoff y la Extreme Championship Wrestling de Paul Heyman había logrado sacarlas del negocio, aunque la manera de hacerlo sería muy distinta una de la otra.
Mientras Paul Heyman había llegado a un trato con WWE a escondidas del talento de ECW, la WCW se negó a sucumbir hasta el momento en el que la empresa tuvo que declararse en bancarrota y a pesar de que Eric Bischoff hizo varios intentos por comprar la compañía a la que le había entregado sus mejores ideas, esta pasó a manos de Vince McMahon.
Ya han pasado dieciocho años de aquel momento en el que WWE había sentido por última vez la presión de entregar un buen producto para que la gente no cambiase de preferencia hacía otra compañía, presión que vuelve a existir desde el momento de la creación y éxito del primer PPV de All Elite Wrestling.
Como los ratings no se encuentran en su mejor momento en el emporio más grande del wrestling y el enemigo principal crece a pasos agigantados se ha decidido tomar una decisión drástica, nombrar a Heyman y Bischoff como directores ejecutivos de RAW y Smackdown Live respectivamente.
Es bien conocido por todos el enorme talento que tiene Paul Heyman en la creación de nuevas estrellas y su capacidad creativa en la cuestión de historias, por lo que su adición a la marca roja podría ayudar a mejorar el producto que se ha ofrecido últimamente en el show de los lunes, según WWE.
Mientras que la adición de Bischoff tiene un carácter más institucional, pues al tener Smackdown un contrato con Fox para la transmisión del show la marca azul en su cadena televisa, se necesitará de un hombre de experiencia que logre ser un punto medio entre la empresa y el medio de comunicación, trabajo ideal para un hombre que tuvo 83 semanas por debajo en los ratings a WWE.
Los fanáticos esperan mucho de esta decisión de WWE que hasta el momento se perfila como una buena, sin embargo mucho dependerá de que tanta libertad les otorgue Vince McMahon.