Para saber ganar hay que saber sufrir primero. En ambos campos del conocimiento, las de Lucas Mondelo son maestras. Contra una correosa Corea del Sur, liderada por Ji Su Park, las españolas han conseguido su primera victoria. Un 69-73 a favor de La Familia es satisfactorio, pero aún queda lo peor.
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Las protagonistas: Ndour no falló
La jugadora más destacada del encuentro ha sido Astou Ndour, con 28 puntos, su anotación más abultada con la selección. Quien ha sido igual de fundamental es Laura Gil, que acabó el Eurobasket con dolencias, ya arrastradas desde el final de la EuroCup y la Liga Femenina Endesa. 14 rebotes ha capturado la murciana, dominando los espacios y haciendo fácil lo imposible.
En el otro lado, Corea del Sur ha presionado hasta el final, con tesón y disciplina. La mayor anotadora ha sido Leesul Kang, con 26 puntos y dando un auténtico recital anotador en tramos del encuentro. La estrella surcoreana, Ji Su Park, jugadora de Las Vegas Aces, no ha tenido el mejor de sus partido, con 17 puntos.
Quien no ha tenido apenas presencia es Alba Torrens, aunque como recordaba Lucas Mondelo, lleva mes y medio sin jugar un partido oficial. Desde la final de la EuroLeague contra el Perfumerías Avenida, la jugadora del Ekaterimburgo apenas pudo jugar. Se perdió, junto con Tamara Abalde, el Eurobasket, debido al Covid-19, y hoy se ha reflejado en la pista, únicamente anotando 2 puntos en 22 minutos.
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El partido: tocó sacar las garras
Como todo primer partido de Juegos Olímpicos, los cuarenta minutos han sido tediosos y duros. El arbitraje durante los tres primeros cuartos ha permitido muchas acciones sospechosas de ser falta, lo que llevó a las jugadoras a bajar al barro constantemente.
Mucho fallo durante el primer minuto, hasta que Torrens rompió el empate a cero con una canasta en la pintura tras movimientos a trompicones. Esta sería la única acción de la jugadora que acabaría dentro de aro. Entre saques de fondo y fallos en el triple , los segundos fueron pasando.
La defensa zonal surcoreana acabó siendo la causante de mucha desesperación hispana. Tramos del primer cuarto acabaron enquistándose en la pintura, llegando a haber hasta tres jugadoras asiáticas presionando a las interiores españolas. De la frustración emergieron errores en defensa, regalando varias veces a las mujeres de Jooweon Chun tiros liberados.
Avocado a la rapidez asiática, que conoce bien, el seleccionador europeo continuó su estrategia del Eurobasket, mantener siempre a dos bases en cancha. El objetivo era no entrar en el desenfreno coreano, consciente la selección de su juego rápido, pero ordenado.
Tras un fallo de Queralt Casas y una 'mandarina' de Silvia Domínguez, terminó el primer cuarto con un 15-16 a favor de España.
El segundo de los tiempos se enquistó aún más, faltaba potencia, faltaba determinación. Las rápidas manos de las de Corea del Sur provocaban numerosos fallos a España, mientras las faltas se repartían frente a los ojos de los árbitros, quienes hacían oídos sordos a las protestas.
Sin acierto en el triple, cada punto coreano dolía el doble. La lucha de Laura Gil en el rebote cada vez era más dura, con una potencia asiática emergiendo en la defensa, y aprovechando la combustión en el ataque. La pívot del Valencia Basket pagaba la frustración con robos, que acababan siempre dentro de aro.
Gracias al bloqueo directo, y a la falta de acierto anotador ibérico, las de la República de Corea se marcharon al vestuario con un 34-33. Sin embargo, las chispas salían de Astou Ndour, comenzando su explosión.
El tercer cuarto fue de España, fue de Astou. Con mayor movimiento de balón, un juego más organizado y las ideas más claras tras el descanso, España fue creciendo poco a poco.
Mientras Astou emergía, Kang reaccionó espectacularmente. Con el acierto en el bolsillo, las jugadoras empezaron a mostrar todas sus cartas. Bloqueos ciegos de Cristina Ouviña para Laura Gil, pases a tablero de Maite Cazorla o triples liberados, todo sumaba para las de Mondelo.
El mayor problema vino cuando Astou cometió su tercera falta, siendo suplida por la joven Raquel Carrera, que ya demuestra una madurez propia de veteranas. Fue salir y recibir una falta personal, víctima de los manotazos y cabezazos surcoreanos. El seleccionador nacional comenzaba a desesperarse.
Cuando Silvia Domínguez sacó el carácter, el encuentro acabó por decantarse. Park se diluía en los ataques, mientras Kang mantenía a sus compañeras en el partido, sacando faltas allí donde pudiera. A los últimos diez minutos se llegó con un 53-54, solamente un punto de diferencia para las de Mondelo.
Empezó el último cuarto con un triple de Domínguez, y la anotación comenzó a abultarse. El basket average iba aumentando no solamente gracias al acierto en ataque, sino en defensa.
La sorpresa fue un cambio radical en el arbitraje, que pasó factura a ambos conjuntos. Los primeros tiros libres vinieron con Astou, lo que obligó a Corea del Sur a endurecer de nuevo su defensa zonal, aunque pendientes de las faltas.
Paralelo al éxito anotador, la desesperación con el arbitraje llevó a Mondelo a pisar la cancha mientras protestaba por unos pasos no pitados, acción que acabó en técnica.
58-68 a favor de España iba el partido cuando solamente quedaban cinco minutos en el marcador, pero el ritmo lo fueron frenando los árbitros, castigando todas aquellas acciones permitidas con anterioridad.
Solamente un par de jugadas hicieron falta para que el Kang y Danbi Kim recortaran las distancias. Park tuvo que retirarse a falta de dos minutos, con aparentes dolencias en la rodilla.
La rápida reacción asiática acabó por hacer perder a España el average. Había que mantener el balón y no dejarse robar. Silvia Domínguez se zafó de sus defensoras, pero doblando un pase para Leo Rodríguez, mandó el balón fuera. Sin embargo, un fallo final de Kang regaló tranquilidad a España. Las de Mondelo habían vencido.
Tras el sufrimiento del frenético baloncesto asiático, las españolas se enfrentarán a las actuales campeonas de Europa, la Serbia de Sonja Vasic.
El próximo partido será el jueves 29 de julio, a las 10:20 (hora peninsular española).