El último día de test en Sepang ha concluido con sorpresa final. Tras una segunda jornada dominada por las Yamaha y en la que 12 pilotos rodaron por debajo de los dos minutos, Jorge Lorenzo ha reaparecido este martes para pulverizar el récord de la pista y demostrar que la Ducati sigue siendo una moto potente, apta para pelear por el campeonato. 1:58.830 ha sido el tiempo del mallorquín, registro que le ha permitido arrebatarle a Márquez el récord que conservaba desde 2015 y dar un golpe sobre la mesa que cambia totalmente las expectativas de cara a la próxima temporada.

Si bien el pasado año supuso una etapa de adaptación y acondicionamiento, éste parece presentarse con un Lorenzo nuevamente competitivo, conocedor de los entresijos de su moto y con mayor experiencia a los mandos de la Desmosedici. Por detrás han quedado las Honda de Dani Pedrosa, que ha fijado el segundo registro más competitivo en 1:59.009, y Cal Crutchlow, a tan sólo 43 milésimas del español. La jornada comenzó sin contratiempos por primera vez en los tres días, con la pista totalmente seca y en condiciones favorables para que los pilotos pudiesen obtener todo tipo de impresiones.

El otro piloto de Ducati, Andrea Dovizioso, protagonizó una mejora final en presencia de la lluvia que le ha permitido colocarse cuarto, a tres décimas de su compañero de equipo. Las otras dos sorpresas de la jornada han venido de la mano de dos pilotos que no dejan de impresionar últimamente, Jack Miller y Álex Rins, quinto y sexto respectivamente. El australiano ha mostrado una rápida adaptación a la Ducati GP17, y el español sigue con las buenas sensaciones con las que terminó la pasada temporada sobre su Suzuki.

Marc Márquez ha sido séptimo, a medio segundo de la cabeza. El actual campeón del mundo ha completado un total de 75 vueltas en las que el principal objetivo era probar el nuevo motor y los nuevos componentes aerodinámicos. Tanto él como Dani Pedrosa han coincidido en que, a pesar de haber realizado una gran mejora en la aceleración, todavía hay que limar algunos aspectos en cuanto al paso por curva.

Por su parte, Valentino Rossi ha sido la primera Yamaha de la jornada. El italiano dio un total de 54 vueltas alrededor del trazado malasio y no fue hasta la 52, ya en el final de la sesión, cuando consiguió hacerse con el octavo mejor tiempo de la parrilla (1:59.449). Su compañero de equipo, Maverick Viñales, se vio en una situación muy distinta. En contraposición al dominio absoluto que marcaron las Yamaha el segundo día de test, el español fue incapaz de rebajar los dos minutos y se sitúa en decimoctava posición, a 1.7 segundos del tiempo de cabeza.

Completando el top ten, Zarco fue noveno con un tiempo de 1:59.511, seguido de Danilo Petrucci a apenas 17 milésimas. 

El mejor de los 'rookies' ha sido Franco Morbidelli. El italiano venía de impresionar en los test realizados en Valencia tras el final de la pasada temporada y todo apuntaba a que volvería a sorprender en Sepang, rebajando los tiempos marcados por Jack Miller el pasado año, quien ocupaba su puesto en el EG 0,0 Marc VDS por aquel entonces. Sin embargo, no lo consiguió, siendo la decimoséptima posición lo mejor que pudo hacer con un tiempo de 2:00.526 en la vuelta 14/55. Destacó también la ausencia de Pol Espargaró en este último día de pruebas tras la fuerte caída que sufrió en la segunda jornada.

Con el primer test de pretemporada finalizado, la próxima parada de los pilotos de MotoGP será del 16 al 18 de febrero en Buriram, Tailandia. Será el segundo test oficial de la pretemporada 2018 y, tras lo sucedido en Sepang, todo indica que será una oportunidad clave para que los equipos terminen de probar distintos materiales y configuraciones y se puedan establecer unas conclusiones reales sobre su verdadero estado para la próxima temporada.