Kobe Bryant representó bastante bien a Los Lakers. Durante 20 años de carrera Black Mamba sumó 5 anillos de campeón de NBA, fue MVP de la temporada regular 2008 y 18 veces seleccionado para jugar en el All Star Game, entre otros innumerables logros. Pero su época acabó el pasado 13 de abril cuando jugó su último partido frente a Utah, y este martes 4 de octubre fue el inicio de una nueva era en la franquicia californiana.

Con Luke Walton como entrenador, los nuevos Lakers dejaron una buena sensación en su primer partido de pretemporada. En Anaheim, el gran equipo de California venció a otro del estado, Sacramento Kings, por 103-84 después de encontrarse por detrás durante los tres cuartos iniciales.

Mientras que los Kings jugaron con sus titulares fueron muy superiores. Liderados por el siempre importante DeMarcus Cousins, los dirigidos por Dave Joerger fueron mejores ya que tuvieron una distancia máxima de 18 puntos en el tercer cuarto.

Sin embargo, la rotación visitante y el ajuste defensivo de los locales cambió el rumbo del juego para ir a la última docena de minutos con una diferencia de cinco (69-64). Allí, con suplentes de los Kings y varios titulares de los Lakers, se dio el triunfo. Los dirigidos por Walton supieron marcar mejor e inclusive hacer todas las labores de una forma superior a sus rivales. Liderados por Tarik Black y Louis Williams (15 puntos para ambos), los de Los Ángeles hicieron todo mejor para sumar su primer festejo -mínimo, pero un festejo al fin-.

Otro punto a destacar de la noche fue el debut de Brandon Ingram. Electo con el puesto número 2 del Draft de este año, el nuevo jugador de los Lakers no pudo con sus nervios y tuvo una floja noche en donde falló sus cinco tiros de campo aunque sumó sus primeros 2 puntos en un uniforme NBA desde la línea de tiros libres. Más allá de esto, todo parece indicar que con el tiempo se irá acomodando para estar listo cuando inicie la verdadera acción de la liga más importante del mundo.