El primer semestre para Newell's significó mucho. En cuanto al plantel fue el último campeonato de Gabriel Heinze con la camiseta Leprosa y además estaba el desafío de volver por la buena senda ya que desde la caída en la fecha 12 del Torneo Inicial 2013 ante Rosario Central  los dirigidos en ese entonces por Berti no ganaban.

Atrás quedó el Torneo Inicial, un campeonato paupérrimo donde San Lorenzo se coronó campeón y Newell's quedó a tan sólo 2 puntos de distancia sin haber sumado de a tres en los últimos siete partidos de dicho torneo. Para ese entonces, el desafío era mejorar de cara a un primer semestre donde la idea era repetir y mejorar la campaña en Copa Libertadores con respecto al año anterior -donde se llegó a semifinales- y aprovechar el no desarme del plantel para poder dar pelea en lo más alto de la tabla.

Lejos estuvo de eso el equipo que en primer término dirigó Alfredo Berti. Los malos resultados, la eliminación del equipo rosarino en fase de grupos de la Copa Libertadores y una actuación mala en el juego harían que el sucesor de Martino dejara el cargo.

A su reemplazo asumiría Lunari, también hombre propio de Newell's, con el objetivo de poder mejorar la campaña hasta el momento. Finalmente los rosarinos terminarían un pobre torneo con 25 puntos producto de seis victorias, siete empates y seis derrotas; 22 goles a favor y 18 en contra. Poco para destacar de la corta era de Lunari, que dejaba el cargo y la institución finalizado el torneo.

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