Los Brooklyn Nets no han hecho una mala campaña. Si bien es cierto que finalmente no han conseguido unos buenos resultados, los números no muestra el nivel real de juego. Y más viniendo de donde vienen. Ya han pasado varios años desde aquel gran traspaso de Kevin Garnet y Paul Pierce, que llevó a dos estrellas a los Nets pero dejó ir a cambio varias rondas de draft. Finalmente, el experimiento no funcionó muy bien, y los Nets siguen pagándolo desde entonces. Ya son varias las estrellas que pueden haber escogido los Celtics con aquellos picks, y mientras los Nets han ido perdiendo partidos sin poder hacer nada para reconstruir.
Sin embargo, parece que este último año han estado haciendo las cosas bien. Entre Sean Marks (General Manager) y Kenny Atkinson (entrenador jefe) han conseguido juntar algunas piezas de valor. Aprovechando que tenían espacio salarial se comieron contraros monstruosos (Mozgov, Carrol y Crabbe) pero a cambio obtuvieron piezas como D'Angelo Russel y rondas de draft. Seleccionaron a Jarret Allen, que parece que va a ser un interior muy válido para esta liga, y el equipo tiene un estilo de juego rápido y vistoso. Además, se les exculpa algo por haber tenido lesionados a su backcourt titular una gran parte de la temporada (Jeremy Lin y Russel)
Ahora además, parece que van a apostar por reforzar su equipo técnico, con exjugadores que conocen la liga y son jóvenes y con posibiliadades de aprender y aportar. Thiago Splitter, que fue campeón de la NBA con los Spurs, llega como scout, y Pablo Prigioni como entrenador asistente. Prigioni ya tiene experiencia como entrenador principal en España, donde entrenó al Baskonia, y se va a la NBA a aprender de los mejores. Por su parte, Splitter tendrá además deberes adicionales como el desarrollo de jugadores en la cancha.
Así pues, los Nets siguen reforzando a sus formadores de jugadores para tratar de desarrollar el talento que vayan consiguiendo poco a poco. Una buena estrategia para un equipo al que sus errores pasados aún les afectan, y que poco más pueden hacer para tratar de mejorar en una liga tan competitiva como la NBA.