El base del Real Madrid fue absoluto protagonista de la segunda victoria ante Panathinaikos. Dos a cero. Solo hay que dar un paso más para llegar a la Final Four y Campazzo fue, en buena parte, responsable del primer triunfo y claro artificie del segundo. 13 puntos, siete rebotes, nueve asistencias, cinco robos y 26 de valoración.

En la segunda parte ha puesto en pie al Wizink Center con su magia y su coraje. Más que nunca ha demostrado que va postulándose como uno de los mejores bases de Europa. Después del partido ha acudido a zona mixta para ofrecer sus impresiones acerca de este triunfo y del sufrimiento que le espera a él y a sus compañeros para lograr ese tercer K.O en Atenas.

Misión cumplida

"Cumplimos los objetivos que nos planteamos antes de empezar los Play-Off que era intentar conseguir dos victorias en casa. Es muy importante ir a Grecia con 2-0. Sabemos que no va a ser fácil allí. Cada partido va a ser distinto. En el primero jugamos bien, hicimos cosas buenas y en el segundo mejor, hicimos cosas muy buenas".

"Cada partido va a ser distinto, tenemos que estar preparados para cómo hacer allá con el ambiente. Ellos juegan mucho mejor de local, con más confianza así que hay que disfrutar obviamente y dar vuelta a la página y estar preparado para lo que se viene", explica Campazzo.

Números de NBA

La exhibición que ha ofrecido el argentino durante los 22 minutos que ha estado en cancha ha sido digna de alabar. Podría decirse que está en su mejor momento de la temporada. Más aún ahora que Prepelic ha ganado confianza en la posición de base y eso le permite dosificar y saltar al juego con más chispa y energía. Pese a ello, 'Facu' espera que lo mejor esté por llegar.

"Espero que no sea el mejor momento de la temporada, que vengan mejores. Pero me siento muy bien, gracias a Dios este es un deporte colectivo y cuando el equipo anda bien, las individualidades crecen y es lo que se vio hoy. Quizás hoy conmigo en estadística me fue bien, pero creo que si le veía la cara a cada jugador a la hora de disputar cada pelota, de correr la cancha, de defender, teníamos la mirada de ganar y de querer pasarlos por encima con concentración y determinación".

"No solamente se gana a Panathinaikos con intensidad sino jugando bien al baloncesto y creo que estuvimos muy concentrados durante todo el partido. Obviamente tenemos que ser exigentes con nosotros mismos y mejorar detalles porque al fin y al cabo en una serie como esta los detalles hacen grande la diferencia", concluye Campazzo.

Calathes, anulado por completo

En este segundo partido no ha habido ninguna opción para el base del Panathinaikos. Solamente logró anotar un tiro libre y estuvo perdido durante todo el encuentro. Gran culpa de ello tuvo la defensa blanca que actuó como una fortaleza casi indestructible. Así lo explica Campazzo.

"Hoy teníamos que estar preparados para lo que se viene. Él es un jugador de tremenda calidad con mucha herramienta en ofensiva y en defensa. Él es como la cabeza de la serpiente de su equipo. Se requiere una atención extra a la hora de defender. Hoy hicimos un gran trabajo con él, pero sabemos que allá va a ser distinto y tenemos que estar doblemente concentrados y más allá de él, creo que también hay alrededor una calidad de jugadores tremenda que hay que tener en cuenta y también se requiere una concentración y un esfuerzo extra".

Rick Pitino se rinde ante Campazzo

Hasta siete rebotes capturó el argentino. Sorprende por el hecho de que su 1,82 es bastante inferior a los pívot o ala-pívot con los que ha peleado. Ese aspecto lo ha destacado el entrenador del Panathinaikos. El argentino agradece los halagos. "La verdad que viniendo de él, lo valoro mucho. Es un entrenador que respeto mucho, tiene mucha historia en el baloncesto mundial así que eso quiere decir que uno hace las cosas bien".

"Todo el tiempo uno lidia con que es más bajito que el resto. Entonces trato de hacer oídos sordos y seguir jugando y disfrutando de cómo lo hago". No hay obstáculos para él, siempre concentrado en su juego y evadiéndose de sus comentarios acerca de su estatura.

No existe el miedo ante el infierno de Atenas

Jugar en el OAKA siempre es muy duro. Ya lo comprobó el Real Madrid hace casi un mes y en todas las ocasiones que ha acudido allí. Es una caldera y toca sufrir mucho para salir airosos en uno de los dos partidos, pero Campazzo tiene las ideas claras.

"Asustar no. Creo que los 16 jugadores que estamos aquí estamos contratados para este tipo de responsabilidad, de presión, para hacer cosas difíciles. Aceptamos esta responsabilidad y esta presión y sabemos que no va a ser fácil. Hay que ser sumamente detallista y jugar muy bien al baloncesto para poder ganar allí. Va a ser un partido totalmente distinto al que veníamos viendo, pero hay que intentar controlar el juego, las emociones del juego, los tiempos. Al fin y al cabo como decía antes, los mínimos detalles hacen grandes diferencias y para jugar allí tenemos que hacer un gran partido".

Máxima determinación

En ocasiones, después de un partido tan apretado, llega otro más relajado. Así sucedió el año pasado y en esta ocasión ha sido una radiografía. Los jugadores tenían en mente repetir la historia. "No queríamos que después de una victoria tan ajustada nos relajásemos un poco y ellos se vengan con todo. Creo que estuvimos muy bien preparados en ese sentido desde el minuto uno del primer cuarto siendo agresivos, yendo a canasta con determinación, defendiendo con determinación y jugando como un equipo".

"Fuimos muy solidarios en todo momento. Creo que quien más puntos hizo fue 13 puntos de los nuestros. Eso quiere decir que nos pasamos muy bien la pelota, todos anotaron. Así que creo que para el rival eso es un dolor de cabeza", sentencia Campazzo.

A prepararse para el tercer partido

Ahora el Real Madrid, al no jugar ACB este fin de semana tendrá tres días para preparar el encuentro en Atenas. "Ahora vamos a ajustar, ver vídeos nuestros, de ellos, de estos dos partidos, ajustar detalles. Al fin y al cabo hay que hacer un gran partido para conseguir una victoria allá, no va a ser fácil, pero bueno, vamos dos a cero y no significa nada todavía si no ganamos uno más. Así que tenemos que ir con la misma determinación y concentración".

Así finalizó Campazzo sus declaraciones posteriores al segundo choque entre el Real Madrid y el Panathinaikos. Protagonista del partido, contento, pero cauto. Sabe que aún queda una dura batalla que superar.

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