Comenzaba una noche especial para todos los amantes de la NBA y para todos los aficionados del baloncesto en general, y una noche también marcada por el tributo a Kobe Bryant y a su hija Gigi, recientemente fallecidos en un accidente de helicóptero. Antes de que diera comienzo el choque, las actuaciones de artistas como la de Jennifer Hudson hicieron aflorar los sentimientos en un United Center de Chicago repleto de guiños a la ‘Mamba’.

Poco después, iba a dar comienzo un partido que junta cada año a lo mas selecto del baloncesto mundial en una misma cancha. Un encuentro lleno de show y espectáculo, que está marcado por los continuos mates y ‘alley-hoops’, y que este año tenia cambios importantes en las reglas del partido para intentar darle un poco mas de aliciente y emoción.

Primera mitad con un cuarto para cada equipo

Arrancaba el primer cuarto con una defensa mas férrea de la que nos tienen acostumbrados en los All star, y con un Kawki Leonard muy enchufado y anotando triples con un acierto que todavía no habíamos visto en toda esta temporada. El equipo de Lebron se consiguió llevar la primera ‘manga’ con el resultado de 53-41 y con ello, el premio en metálico para su fundación. El segundo parcial fue otra historia completamente diferente y jugadores como Kemba Walker y el propio Antetokounmpo se echaron el equipo a la espalda, y consiguieron endosarle un 51-30 al conjunto de James para irse por encima en el marcador al túnel de vestuarios.

El nuevo formato impulsó la competitividad

Tras un gran show musical en el descanso, se reanudó lo meramente deportivo con una gran igualdad y con un intercambio de canastas que hizo que el parcial acabara en empate y el premio de ese cuarto se acumulara para el ganador final. Un gran Chris Paul desde la línea de 3 y un Rudy Gobert dominante en la pintura fueron los mas destacados del tercero.

Con esto se llegó a un extraño y emocionante último parcial, en el que no había tiempo y se tenía que llegar a 157 puntos para acabar ganando el partido. Se acabaron las canastas fáciles y los mates sin oposición, todo el mundo quería ganar y ser protagonista para llevarse el preciado MVP. El equipo de Lebron empezó en desventaja, pero pronto consiguió empatar el encuentro y poner en lo alto la emoción en el United Center, hubo muchas faltas y hasta revisiones en un final de locura que se decidió en un tiro libre que anotó Anthony Davis y que dejo el resultado en 157-155 para el equipo de Lebron James.

El MVP que acredita como mejor jugador del partido fue para Kawhi Leonard, que tuvo una noche sensacional desde el triple y acabó anotando 30 puntos, y además siempre tendrá el honor de ser el primer MVP “Kobe Bryant Award”. Termina un gran fin de semana en Chicago donde las estrellas de la liga han brillado antes de encarar el tramo decisivo de la temporada.