Los Phoenix Suns reciben noticias dispares en las últimas horas. Tanto es así, que el alero P.J. Tucker ha tenido que someterse a una operación en su espalda, lo cual le apartará entre seis y ocho semanas, perdiéndose así el inicio de la nueva temporada. No obstante, no todo son malas noticias en la franquicia de Arizona, ya que su principal referente ha vuelto a entrenarse con normalidad.

El base Eric Bledsoe ha vuelto a ejercitarse con la plantilla en los conocidos cinco contra cinco, más conocidos por ser los simulacros de partido. El jugador tuvo que acudir a quirófano durante la pasada temporada para solucionar la lesión de menisco que sufría. Esto le apartaría de las pistas durante una gran parte de la temporada. Esto provocó que el equipo se aferrase al tan conocido tanking. O lo que es lo mismo: dejar perder partidos en busca de una mejor posición en el Draft.

Esta noticia hace que los aficionados de Phoenix Suns afronten con algo más de optimismo el inicio de temporada, ya que podrán disfrutar desde el primer momento de sus tres mejores jugadores: el propio Eric Bledsoe, Brandon Knight, y el jovencísimo escolta Devin Booker.

El futuro de la franquicia

Actualmente, los Suns no poseen de un equipo que les garantice ni siquiera la lucha por los puestos de Playoffs. Pese a ello, la plantilla es joven, y esta temporada servirá de transición, en busca de la adaptación a Earl Watson, entrenador que suplió a Jeff Hornacek la pasada temporada, y que cuenta con la aprobación de la plantilla.

Deben confiar en la progresión de Devin Booker y del discutido rookie Dragan Bender, la vuelta al buen rendimiento de Tyson Chandler, y que jugadores como Archie Goodwin o T.J. Warren comiencen a poseer una regularidad que, a día de hoy, ha brillado por su ausencia.