El desastre continúa en los New York Knicks. Desde su llegada en 2014 se esperaban muchas cosas de Phil Jackson. Con él regresaba la esperanza a un Madison Square Garden necesitado de alegrías. Sin embargo, el resultado ha sido bien distinto y, a día de hoy, está dispuesto a derruir el que ha sido uno de sus pocos aciertos.
En el Draft de 2015 apostó por Kristaps Porzingis con la elección número cuatro. La decisión no estuvo exenta de polémica, puesto que fueron muchos los aficionados que no vieron con buenos ojos la llegada del letón. No obstante, éste iba a dar la razón a su valedor ya en su año rookie.
Pero nadie esperaba lo acontecido en los días previos al Draft de 2017. Phil está dispuesto a traspasar a la joya de 21 años lo que, junto a la previsible salida de Carmelo Anthony, acabaría por demoler lo poco aprovechable que hay en la franquicia.
El actual presidente de los Knicks asegura que piensa en lo mejor para el equipo. Algo que parece no encajar con su decisión que, sin duda, ha sido la gran noticia de lo que llevamos de offseason. Todo indica que no hay vuelta atrás, salvo que ninguna oferta sea del agrado del de Montana.
Según los rumores, los 29 equipos restantes ya han preguntado por la situación de Porzingis. De hecho, la propia franquicia neoyorquina lo ha ofrecido a los Phoenix Suns a cambio de Devin Booker y el pick 4, oferta que ha sido rechazada por los de Arizona.
El panorama pinta a que Porzee no volverá a jugar para un MSG que ya le idolatraba. Él era el futuro, pero parece que ahora deberán esperar a la llegada de un nuevo ídolo si, tal y como ha insinuado Phil Jackson, 'Melo' también acaba siendo traspasado.
Ofertas no van a faltar y el teléfono no va a parar de sonar. No es para menos, hablamos del unicornio de la NBA. Un 2'21 metros capacitado para hacer de todo tanto en ataque como en defensa y que, para colmo, se ha alzado como ganador del Skills Challenge del All-Star 2017 celebrado en New Orleans.
Sus números demuestran lo que promete: 18'1 puntos, 7'2 rebotes y 2'0 tapones. Además, buenos porcentajes de tiro para un jugador que intenta casi cinco triples por partido: 45'0% en tiros de campo y 35'7% en tiros de tres.
Lo tiene todo para dominar y para hacer que Phil se arrepienta de traspasarle. El único problema que ha presentado hasta ahora son las lesiones, aunque nada tremendamente grave (se ha perdido 16 partidos en la última temporada).
Kristaps Porzingis es una superestrella en ciernes que atesora potencial y, más importante todavía, que tiene los pies en el suelo. La Gran Manzana no está hecha para todo el mundo y él parecía el elegido.
Es incomprensible. Aparte, sí que están dispuestos a renovar a Derrick Rose a la baja, salvo que con su pick 8 del Draft se lleven a Frank Ntilikina, base y gran promesa del Strasbourg IG francés. Nada tiene sentido en los Knicks y, por mal que suene, esto no es una novedad.
Tal vez el que debería salir es Phil Jackson tanto para el bien de la franquicia como para la reputación de Zen Master. Se está echando a perder la figura de un referente admirado por muchos y, de paso, el futuro inmediato de una franquicia que está dejando desierta a la Meca del baloncesto.