Derrota de las guerreras por 23-31 ante una Noruega que pese a no jugar un partido excelso, demostró porque es la selección más fiable del balonmano femenino. Siempre por delante en el electrónico, y aunque en algunos momentos España dio la sensación de poder meterse en el choque, la superioridad de las escandinavas quedo patente en el segundo tiempo, con una Nora Mork inmaculada que llevó en volandas a su equipo a los cuartos de final del Mundial pese a verse con dos exclusiones al final del primer tiempo.

Llegaba España al encuentro con una fase de grupos un tanto irregular, tras conseguir el triunfo ante Eslovenia, Angola y Paraguay, un empate ante Francia y la derrota ante Rumanía. Lo que le otorgaba la tercera posición del grupo y por ende medirse a un Noruega que de manera sorprendente quedaba segunda del grupo tras perder en la última jornada ante Suecia.

España reaccionar al golpe incial

Con el papel de favorito imponía su ley en los primeros minutos el combinado noruego, que liderada por una estelar Mork en el central ponía la primera ventaja seria del encuentro, 0-3. España se soltaba tras los primeros compases de dominio de Noruega, y gracias a una enchufada Cabral se metía en el encuentro pasados los primeros cinco minutos de encuentro, 2-4. Pese a la tímida reacción de las guerreras, las exclusiones iban a devolverle una ventaja sólida a las de Hergeirsson.

Dos superioridades para cada equipo que dejaban la diferencia en el electrónico en los cinco goles, 6-11 tras veinte minutos de encuentro. España solo logró un parcial de 2-1 con cuatro minutos en la pista con una integrante más, mientras que los cuatro minutos de inferioridad de las de Viver si los aprovechó Noruega con un parcial de 0-5.

Carmen Martín retiene un balón | Foto: RFEBM
Carmen Martín retiene un balón | Foto: RFEBM

Pese a ello, las pérdidas en ataque de las escandinavas y la mejoría en el ataque de España equilibraron el encuentro hasta poner a solo dos de diferencia el choque, 9-11, a menos de cinco minutos para el descanso. Finalmente intercambio de goles y ventaja de Noruega, que llegaba al intermedio tres goles arriba pero con la sensación de no ser tan superior como podría parecer en los primeros minutos, 10-13.

Al ritmo de Nora Mork

El segundo acto parecía dar atisbos de esperanza a las de Carlos Viver, que seguían en el partido, pero que eran incapaces de equilibrar el choque. La sensación de no poder darle la vuelta el encuentro comenzaba a mermar las prestaciones en el ataque de España. Las guerreras sin embargo seguían de lleno en el ecuador del segundo acto, con el 16-20 que reflejaba en el electrónico.

La diferencia se vio ampliada en los minutos finalesA partir de ahí el equipo escandinavo comenzó a desesperar de manera casi definitiva a una España que para colmo chocaba con la portería noruega. Mork acababa de desquiciar a las guerreras, que con seis goles abajo ya veían imposible darle la vuelta a la eliminatoria. Pese a ello, no dejó de intentarlo el combinado femenino nacional, que se encontró con errores no forzados en ataque y mucha precisión en el ataque de Noruega, lo que finalmente reflejaba el 23-31 final en el marcador.

Tras la derrota, España se despide del torneo intercontinental en los octavos de final, mientras que Noruega avanza a cuartos de final, donde se enfrentará a Rusia para poder acceder a las semifinales del mismo.