Empieza fuerte el Tour de los Alpes para el corredor del Astana en su camino hacia el Giro de Italia en el que tendrá más protagonismo del esperado tras la lesión de Fabio Aru. Es la primera victoria de Scarponi desde la temporada 2011, cuándo se llevó la general del Giro tras la descalificación de Contador.
Scarponi se llevó el triunfo tras ser el más rápido en el sprint final en un grupo de cinco, que se formó en la subida final de Innsbruck y que ninguno de los cinco lograron escaparse en solitario a pesar de los continuos ataques.
Primera etapa, primer final en alto
El Tour de los Alpes comienza con una etapa de media montaña por el Tirol austriaco con varios puertos no puntuables y otras dos subidas en la parte intermedia: Brandenberg (2ª) y Aschau (3ª). La jornada finalizaría en un puerto de 3,7 kilómetros con un 7% de media y rampas máximas de casi el ocho.
Lucha por la fuga y mucho control
La etapa comenzaba con un alto ritmo y la pelea por conseguir meterse en la escapada fue dura. Primero un grupo con el joven Nicola Bagioli (Nippo-Vini Fantini) y después se quedaría en solitario en cabeza de carrera el ruso Alexander Foliforov. El control de los equipos fuertes Astana y Sky provocó que el corredor del Gazprom-Rusvelo fuese cazado y volviesen los ataques, para formarse la fuga del día compuesta por: AIuri Filosi (Nippo-Vini Fantini), Francesco Gavazzi (Androni Giocattoli) y Matthias Krizek (Tirol Cycling Team).
Los tres corredores se entendieron a la perfección y lograron el permiso del pelotón hasta lograr una renta máxima de casi tres minutos. El pelotón que debido al alto ritmo se quedó reducido en pocas unidades, hasta que al pie de la última ascensión el gran grupo contaba con apenas cincuenta ciclistas.
Subida con continuos ataques en Innsbruck
La diferencia de los tres escapados fue cayendo poco a poco gracias al trabajo de Peter Kennaugh. Nathan Brown (Cannondale Drapac) intentaría contactar con los tres de cabeza pero el trabajo del equipo británico lo reintegraría al grupo pocos kilómetros después. Los últimos fugados en ser cazados fueron los dos corredores italianos tras una avería de Krizek que le descolgó precipitadamente de la cabeza de carrera.
Kenny Elissonde sería el ciclista encargado de poner ritmo en la ascensión final con Geraint Thomas a rueda. El primer corredor en lanzar un ataque sería Ben Gastauer al que daría continuidad Hugh Carthy. El movimiento que rompería definitivamente la cabeza del pelotón sería el del galés Geraint Thomas, que en un primer momento se llevó a rueda a Scarponi, Cattaneo y Pozzovivo.
Los cuatro de cabeza llegarían con una mínima ventaja al último kilómetro pero un parón permitió que entrasen Formolo y Pinot. El sprint final lo lanzaría Pozzovivo con Thomas y Scarponi a rueda y finalmente el ciclista de Astana hizo valer su superioridad y batió con relativa facilidad a sus rivales.
Segundo final en alto
La segunda etapa volverá a tener un perfil parecido con un puerto prácticamente de salida. La subida a Brennero (1ª) de 10,8 kilómetros al 3.1% de media que se corona en el km.29 de etapa, ayudará a que se forme la fuga. Tras una parte intermedia prácticamente llana los ciclistas tendrán que encarar el St. Justina (2ª) 4,8 kilómetros al 8,2% de media ya en la parte antes de la ascensión a Innervillgraten.
Clasificación
