Chris Froome no ha desaprovechado la ocasión. Sabía que este día podía meter un tiempo precioso a sus máximos rivales y así ha sido. El líder de Sky se ha impuesto en la larga crono de Logroño tras saber dosificar y terminar realizando un ejercicio de potencia en el que no tuvo rival, a pesar de la gran actuación de Wilko Kelderman (Team Sunweb), segundo a 29 segundos, ahora dueño de la tercera posición del podio.
Un terceto formado por Vincenzo Nibali (Bahrain Merida Pro Cycling Team), Ilnur Zakarin (Team Katusha-Alpecin) y Alberto Contador (Trek-Segafredo) han seguido la estela de ambos gallos, a otro nivel, a 57 y 59 segundos respectivamente. El italiano buscaba minimizar pérdidas, aunque ahora ya se encuentra a casi dos minutos en la general, segundo a 1:58, mientras el ruso fracasó en su intento de defender el podio frente a un brillante Kelderman, ahora a 2:40 de Froome. Diferencias interesantes, pero no definitivas.
El madrileño, por su parte, tenía en mente escalar puestos en la general, consciente de su superioridad contra el crono, y así lo ha hecho: partía noveno y acaba quinto tras la etapa, aunque muy lejos del podio y a cinco minutos del rojo.
Por último, destacar la gran pérdida de tiempo de hombres como Esteban Chaves (Orica-Scott), cuatro minutos de pérdida y hundido en la general, Michael Woods (Cannondale-Drapac Pro Cycling Team) y Fabio Aru (Astana Pro Team), entre tres y tres y medio, y Miguel Ángel López (Astana Pro Team), dos y medio.
Una crono para especialistas
Después del segundo día de descanso, la Vuelta abría el bloque definitivo con una importante contrarreloj individual de 40 kilómetros entre el Circuito de Los Arcos (Navarra) y la ciudad de Logroño. Con un perfil mayoritariamente llano, aunque con algunos repechos incómodos, se trataba de una prueba para especialistas, algo que, unido a su moderada distancia, permitiría abrir diferencias importantes. Asimismo, sus largas rectas (a excepción de los primeros kilómetros, que discurrían por el propio circuito de motociclismo) y el hecho de discurrir por terreno abierto podría hacer que el viento jugase un papel importante.
Kämna, sorpresa momentánea antes del 'expreso' Ludvigsson
La jornada comenzó con varios corredores de Aqua Blue Sport liderando la tabla de tiempos, pero pronto sería el italiano Daniel Oss (BMC Racing Team) el que se pondría primero tras realizar una crono de menos a más, favorecido además por el viento de cola. La ausencia de los mejores especialistas hacía que un buen número de rodadores se fueran mejorando los tiempos y establecieran una bonita lucha por los primeros puestos. Mientras Quick-Step Floors jugaba sus numerosas bazas (Lampaert, Trentin y Terpstra) para asaltar el podio provisional, era el joven —20 años— Lennard Kämna (Team Sunweb) quien daba la sorpresa marcando un interesante 48:30 en meta, sin olvidarnos del inesperado Alexis Gougeard (AG2R La Mondiale), segundo hasta ese momento.
El sueco Tobias Ludvigsson (FDJ) se puso primero con un tiempo (48:07) a tener en cuenta
No obstante, el sueco Tobias Ludvigsson (FDJ) demostró por qué era uno de los favoritos, batiendo todos los registros intermedios hasta parar el crono en 48:07, un registro a tener muy en cuenta. Tal fue el esfuerzo del escandinavo, que tras cruzar la línea de meta acabó exhausto y por los suelos. Otro gran contrarrelojista como Bob Jungels (Quick-Step Floors), sin presión alguna en la carrera, se mantuvo en la pelea en los primeros compases, pero no consiguió mejorar el tiempo del sueco, conformándose con el tercer puesto provisional.
Kelderman se crece...
Sin nadie más que marcara registros destacables, llegó el turno de los favoritos con un Alberto Contador que iba a por todas, batiendo el tiempo de Ludvigsson en el primer punto de referencia, pero Wilco Kelderman, el mejor rodador de los gallos junto a Froome, lo arrasaría con una mejora de 18 segundos. Por su parte, el británico, muy calculador, se dejaba 23 segundos con el neerlandés, que doblaba a Esteban Chaves como un avión.
Gran crono de Kelderman, mejorando los tiempos de Contador, que a su vez batía los de Ludvigsson
Mismo guion en el segundo punto, con el madrileño recortando tiempo a sus rivales más inmediatos (Woods, Aru, Miguel Ángel López), pero un encendido Kelderman ya mejoraba en 27 segundos al de Pinto, mientras Zakarin luchaba con todo por no perder el podio ante la exhibición del holandés. Mientras tanto, Wout Poels (Team Sky) finalizaba la crono a solo cuatro segundos de un Ludvigsson que ya sabía lo que se le venía encima: un minuto después Contador se ponía líder al ser el primero en bajar de los 48 minutos (47:59).
...pero Froome es mucho Froome
No obstante, un Chris Froome con las baterías al cien por cien ya había recuperado todo lo perdido en el primer parcial y superaba el tiempo de Kelderman en el segundo punto intermedio, posicionándose como el favorito para ganar la etapa, mientras Nibali marcaba tiempos similares a los de Contador, suficientes para un top-6. Hombres como Woods o Aru perdían más de dos minutos con los mejores, al igual que 'Superman' López, otro de los damnificados, aunque no tanto como un exhausto Chaves, que se despedía del podio al perder más de tres minutos.
Una crono de menos a más permitió a Froome meter casi un minuto a su rival más directo: Nibali
Los más fuertes iban entrando y como era de esperar, Kelderman subía a lo más alto con un tiempazo de 47:29, mientras Zakarin y Nibali casi calcaban el tiempo de Contador, los tres en un pañuelo. Aún faltaba poner la guinda a la etapa y, cómo no, debía ser Froome el autor de tal impronta, con un crono estratosférico de 47:00, finiquitando una crono de menos a más y cumpliendo con los pronósticos. Hachazo en toda regla a la general que de no ser por el viento favorable, podría ser mayor. Sus rivales deberán pasar al ataque en la montaña del norte.
Mañana, final en alto en Los Machucos
La 17ª etapa de la Vuelta presentará un nuevo final en alto, esta vez en Los Machucos (7,2 kilómetros al 8,7% y máximas del 26%), una durísima e inédita ascensión en la Cantabria pasiega. La etapa, que partirá desde Villadiego (Burgos), dejará atrás la meseta castellana por medio del Portillo de Lunada (2ª) y su imponente descenso, para endurecer la carrera con el Puerto de Alisas (1ª), justo antes de hacer frente a las exigentes rampas de Los Machucos, puerto de categoría especial que podría dar un vuelco a la general después de la exigente crono de hoy.
