El 14 de julio, fiesta nacional gala, vivió el momento clave del Tour de Francia. Primera etapa de montaña seria del Tour de Francia. Etapa unipuerto de 167 kilómetros con final en la inédita cima de la Pierre-Sant-Martin, en plenos Pirineos. Un puerto tendido de no grandes desniveles pero que junto con el calor asfixiante se convirtió en la 'tumba' de muchos ciclistas.

Chris Froome lideraba la prueba con una sustanciosa ventaja sobre sus rivales. Por ello, Movistar endurecía la carrera en los primeros kilómetros de la subida final buscando la debilidad del inglés. Sin embargo, encontraron la debilidad de muchos otros: Rui Costa, Thibaut Pinot, Vincenzo Nibali.... La etapa era más dura de lo que se preveía.

Aparece el 'rodillo' del Sky

A falta de ocho kilómetros, Chris Froome manda a su ejército a la lucha. Suben el ritmo de la mano de Geraint Thomas y Richie Porte. El resultado: una masacre. Ceden grandes rivales como Alberto Contador, Tejay Van Garderen o Joaquim Rodríguez. Solo quedan tres en cabeza: Richie Porte, Chris Froome y la gran amenaza del británico, Nairo Quintana.

Todavía quedaban siete kilómetros a meta y el Tour estaba destrozado. El colombiano se soldaba a la rueda de Froome y todo el mundo esperaba su ataque. Sin embargo, el rostro del colombiano no desvela si va bien o por contra va sufriendo. La duda fue despejada 500 metros más tarde.

Un ataque fue suficiente

Tuvo que encargarse personalmente Froome del colombiano con un ataque 'marca de la casa'. El británico se pone en pie brevemente para acelerar y sentarse a continuación aplicando una cadencia desmedida. Mientras Nairo se vio impotente de responder y solo pudo observar como el maillot amarillo se iba alejando de su vista.

Los kilómetros pasaban y el ritmo del líder de Sky era endiablado, parecía que el inglés estaba volando con su bicicleta mientras el resto sufría por llegar cuanto antes a meta. Una de las mayores exhibiciones de los últimos años de la ronda gala.

Las diferencias en meta fueron escandalosas para una etapa de la que se preveía pocas diferencias. Un solo ataque del inglés de Sky fue suficiente para dejar muy bien encaminada su segunda victoria en la Grande Boucle, algo que la postre consiguió.

Vídeo del ataque y kilómetros finales