Liberty Media sondea a Madrid para albergar el Gran Premio de España

Según ha informado el diario El Confidencial. Existiría la posibilidad de que el Gran Premio de España dejara de disputarse en Cataluña, como lo viene haciendo ininterrumpidamente desde 1991.

Los hechos de este último año en Catalunya hacen que el gobierno catalán carezca de interlocutores para negociar la renovación del contrato del circuito con la Formula 1, por lo que, de no llegarse a un acuerdo, el Gran Premio de España quedaría en el aire y para poder seguir disputándose debería celebrarse en cualquier otro circuito del país. Esto ha provocado que se inicien contactos con el Gobierno de Madrid para la posible celebración del Gran Premio el la localidad capitalina.

El Govern aporta 7.5 millones de Euros mientras que Barcelona dejará de prestar subvenciones al circuito a partir de 2019. Desde que Ada Colau llegara al ayuntamiento de la ciudad Condal, estas ayudas millonarias se han visto reducidas y se tiene previsto eliminarlas cuando termine el contrato con la Formula 1 en 2019 si el poder no cambia de manos.

Liberty y los circuitos urbanos

Cada vez hay más circuitos urbanos en el calendario de la Formula 1 y es algo que gusta y mucho a Liberty Media, que también es partidario de realizar espectáculos callejeros con los monoplazas a lo largo del año, como sucedió en Londres el pasado año.

En Formula E, todos los circuitos son urbanos y eso es algo que quiere imitar la Formula 1, por lo que si se suman los problemas con la renovación del circuito de Montmeló al fomento que hay desde Madrid a un nuevo circuito urbano de Formula 1, puede darse la situación que a partir de 2019 el Gran Premio de España pasara a disputarse por las calles de la capital.

El circuito de Valencia, un mal ejemplo

No hay que olvidar que la organización de los cinco grandes premios de Europa que se disputaron en la capital del Turia acabaron convertidos en un escándalo político de primer orden, que marcó una época para el PP en la región con Francisco Camps como presidente.

Para evitar esto, una alternativa que está ganando adeptos es que las aportaciones de los gobiernos locales o centrales sean a cargo de los impuestos que generan los correspondientes circuitos. Así ha sucedido en Austin (Texas) y en Francia.