Está siendo el gran problema del equipo Mercedes a lo largo de la presente temporada. Tanto Lewis como Nico lo están patiendo carrera sí, carrera también. Si el dolor de cabeza que les producían los frenos desde 2014 en cada gran premio, este año se les ha sumado la estructura del embrague, que no termina de ser la correcta para el monoplaza que llevan.
Ya se vio en la primera cita mundialista, en Australia, donde Lewis tenía la primera posición y perdió varias al llegar a la primera curva. Esta acción se fue repitiendo varias veces, lo sufrió más el inglés, pero Rosberg tampoco se libró. El jefe de la escudería alemana, Toto Wolff, no cree que "puedan solventarlo para lo que resta de temporada". Entonces la solución a este problema lo dejan para el año que viene; año nuevo, vida nueva.
"Es nuestro talón de Aquiles"
Toto calificó de "no ideales" las salidas de las últimas carreras. Añadió también que "cambiarán la estructura para el año que viene".
Toto Wolff dijo sobre el embrague que "en este momento es un gran problema para ellos". El jefe del equipo aseguró, a principio de temporada, que la empresa matriz de la escudería, Daimler, les ayudaría, pero ahora parece que las cosas han cambiado y no saben si el problema es de los monoplazas o de los propios pilotos.
"No sabemos qué problema hay"
Para finalizar dijo que "no saben si el problema es del diseño de la construcción o de los pilotos que no saben operar con él".
La escudería alemana ya tiene faena de cara a la temporada 2017, solucionar el tema de los frenos, que llevan siendo su talón de Aquiles desde 2014, y averiguar si el embrague es el que falla o son Hamilton y Rosberg los que no saben usarlo. La cuenta atrás empieza desde ya, comenzar a centrarse en el monoplaza del año que viene, ya que los títulos de esta temporada están casi cien por cien asegurados ambos.